— Redacción Diario El Pueblo —

El alcalde provincial de Caravelí, Arturo Montesinos Neyra, considera que la solución del enfrentamiento entre los mineros informales de Ático Calpa, Calpa Renace y la empresa Intigold Mining S.A. debe ser tratada con los titulares de cada entidad.

El burgomaestre de Caravelí anunció ayer que conjuntamente con  los consejeros regionales Elmer Pinto y Harberth Zuñiga gestionará una reunión para mañana lunes y después de la misma, estima que se lleve a cabo una junta con los titulares de las mineras involucradas en los enfrentamientos que dejaron 14 muertos, 31 detenidos y personas desaparecidas en el campamento minero de Ático.

Advirtió que existe la amenaza que los sucesos de violencia se repitan, en vista que no se busca una solución integral y definitiva al problema de la minería informal.

“Mañana lunes sería la primera reunión para luego convocar a las asociaciones de mineros de Ático para que se vea el proceso de formalización o ver la disposición para ello”, sostuvo.

El primer paso sería contactar con la junta de accionistas de la empresa Intigold Mining que, según Montesinos, permitió el ingreso de los mineros en proceso de formalización que corresponderían a Ático Calpa y Calpa Renace para la extracción mineral del lugar, pero que por las regalías cobradas en la concesión habrían tomado la decisión de enfrentarse. A partir de ello, se visualizaría una solución para afrontar la problemática que mantiene en vilo a Arequipa y al Perú.

Por otro lado, Montesinos opinó que la declaratoria de emergencia en los distritos de Caravelí y Ático no resolvería las disputas. Al igual que el alcalde de Atico, Milton Medina, advirtió que desde hace dos años se gestionan mesas de diálogo, pero no hay resultados.

“Con la declaratoria de emergencia no se soluciona. Quitarle la concesión tampoco es la solución. Los titulares tienen que sentarse y las autoridades intervendrán para ser los mediadores”, manifestó Montesinos.

Asimismo, para el burgomaestre provincial, el Ministerio de Energía y Minas, a cargo de Alessandra Herrera, también debe tomar acciones concretas para que ya no se cobren más víctimas humanas que, según Montesinos, no corresponden a mineros, sino a gente que viene de Lima y otras zonas.

Se estima que en el campamento minero ubicado a 60 kilómetros de Atico existía la presencia de mil trabajadores de Calpa Renace y cerca de 500 de Ático Calpa, que serían protagonistas de la disputa por extraer el mineral de la zona a raíz de la autorización de la empresa Intigold Mining S.A. para la intervención en el lugar.