Las fiestas y la salud
Por: Carlos Meneses
“El sector Salud no puede vivir en el caos si queremos superar el problema de la atención en todos los niveles y nombrar con urgencia un responsable de la Gerencia Regional de Salud”.
Los males que se evidencian en el desorden del manejo de la administración del Estado peruano hacen necesario que no descuidemos un mínimo la marcha administrativa de los poderes establecidos y el acatamiento al orden constitucional, a las leyes vigentes y a un correcto proceder en la conducción de la cosa pública.
Sea por ineficiencias o por inadecuados tratos entre criterios diferentes, en el país está imperando la falta de entendimiento para tratar su problemática y solucionar sus asuntos delicados. Esta ausencia de cuidado ha quedado constatada especialmente en el sector Salud a nivel nacional y también local.
Al abandono secular de esta obligación estatal y a la pandemia, de la cual vivimos una cuarta ola, se ha venido a sumar el haber escogido gente inapropiada o mantener a quienes no eran útiles para soluciones. Las consecuencias están a la vista. Los hospitales necesitan de todo y de alguna manera revelan carecer de jefaturas y liderazgos.
Como pudo observarse en los primeros días de este mes, cuando se publica una ampliación necesaria por ley de la permanencia de trabajadores que fueron contratados a raíz de la epidemia. En Arequipa y en todo el Perú, estamos viviendo un nivel de contagios del coronavirus que se ha tipificado como la cuarta ola, por el número de infectados y por el incremento de fallecimientos producidos. Así también se aprecia un decrecimiento de las campañas de vacunación. Mientras eso ocurre en Arequipa hay desorganización en la atención de hospitales estatales y de la seguridad social.
En Arequipa, la persistencia de mantener en el nivel directivo del sector a personal no competente ha terminado por agravar la situación.