Una mañana de confraternidad y belleza disfrutaron mujeres arequipeñas
— Redacción Diario El Pueblo —

Ayer, en la víspera del Día Internacional de la Mujer, un grupo de mujeres adultas mayores disfrutaron de una mañana de confraternidad y belleza, actividad organizada por la regidora de la Municipalidad Provincial de Arequipa, Susana Condori y con el apoyo de sus compañeras Cleopatra Chávez y Ruccy Oscco, todas ellas concejales de mayoría.

Miembros del Movimiento Peruano Trans de Arequipa, dirigido por Ana Flavia Chávez, ofrecieron corte de cabello, peinado y manicure a todas aquellas mujeres adultas mayores que han trabajado durante años para sacar adelante a sus familias.

En Cerro Juli se reunieron cerca de medio centenar de damas a quienes las atendieron y también la concejal Susana Condori, les entregó alimentos para que lleven a sus hogares y reiteró que, lamentablemente, en Arequipa y todo el país las mujeres adultas mayores son víctimas del abandono e indiferencia, formas de maltrato más comunes en este sector poblacional.

“Es una realidad de muchas familias, basta con recorrer las calles, instituciones sociales y asilos para darse cuenta del gran número de ancianos que han sido abandonados por sus propios hijos u otros familiares. Por ello, en esta fecha especial es que hemos querido brindarles un poco de amor y atención para arrancarles una sonrisa”, enfatizó.

En el departamento de Arequipa 12.5% de la población es adulta mayor y solo el 7% de ellos están registrados en los Centros Integral de Atención al Adulto Mayor de la región, es decir reciben atención.

Por ello, la celebración del Día Internacional de la Mujer, que es hoy 8 de marzo, debe ser una fecha de reflexión y compromiso para trabajar por las mujeres, especialmente los sectores más vulnerables como son las adultas mayores, dijo Condori.

Las concejales Chávez y Oscco, también se comprometieron a trabajar por este sector y atender sus demandas prioritarias.

DATO

Doña Sebastiana Díaz, de 78 años, fue una de las ancianitas atendidas, le cortaron el cabello y la peinaron. Ella se movilizó en una silla de ruedas, acompañada de su hijo Sebastián, para participar de la actividad.

Ella, durante muchos años, trabajó en el campo, tiene 3 hijos y 8 nietos. No puede caminar porque padece enfermedad renal que empeoró durante la pandemia.

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