Por: Carlos Meneses

“La oportunidad para mejorar la administración en la Región y la Municipalidad es la que tenemos ahora”.

Cuando asumieron funciones las dos autoridades electas que manejan el Gobierno Regional de Arequipa (GRA) y la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA) sus titulares advirtieron que, acabado el proceso de transferencia a cargo de equipos que fueron activos en la campaña electoral, los remplazantes en las gerencias y subgerencias serían sujetos a evaluación a los 100 días de haber asumido funciones. El propósito que la ciudadanía recibió con simpatía fue que al término de tal plazo se haría una evaluación de resultados para reajustar tuercas o para realizar cambios.

En los dos casos, esto es tanto en el GRA como en la MPA, estas modificaciones se han producido antes de tal tiempo, pero a tenor de lo que se esperaba en unos casos el resultado no ha sido del todo satisfactorio.

A todos les ha parecido por un lado corto porque se han confrontado, tanto en la región como en la ciudad, significativas circunstancias que obligaron a repensar qué cosa estuvo mal cuando un periodo de emergencia alteró el quehacer institucional y colectivo.

Ese plazo tendrá por esta lógica consideración una duración mayor que bien aprovechada y con el agregado de lo ocurrido con la obra pública encontrada y con los daños que han ocasionado las lluvias, permitirán una mejora sustantiva de los tres meses ya transcurridos.

En todo caso también se han advertido ausencias manifiestas de comprensión entre autoridades y comunidad, sobre todo, en lo que se refiere a la relación entre organismos centro, regionales, distritos, provincias.

El gobierno está intentando hacer efectiva una descentralización que, hasta ahora, no hemos tenido en el país. Es bueno que en el esfuerzo se escuche la voz que reclama un mayor aporte económico y técnico en favor de los pueblos.