Las obras en los hospitales de Camaná, Cotahuasi y Maritza Campos están paralizadas desde el 2018. La consejera regional, Norma Ortega, dijo que no debe haber impunidad por las presuntas irregularidades que rodean estos proyectos y haya las sanciones penales.

Por Jorge Turpo Rivas

Antes de dejar el cargo a fines del 2018, la exgobernadora regional, Yamila Osorio, hizo un recorrido por las obras de los hospitales de Camaná, Cotahuasi y Maritza Campos en el Cono Norte. En todos se tomó fotografías y luego publicó en redes sociales que hacía la entrega de esas obras.

Cinco años después, esas obras siguen abandonadas y con los equipos nuevos oxidándose, según lo corroboró la consejera regional, Norma Ortega.

“En Cotahuasi hay una ambulancia y una camioneta cero kilómetros que se están oxidando desde el 2018 porque nunca fueron usadas, eso es inconcebible porque pudieron ayudar a salvar vidas durante todo este tiempo”, dijo.

La obra del hospital de Cotahuasi podría retomarse en los siguientes meses tras resolverse el arbitraje con el consorcio que ganó la buena pro y recién entrar en funcionamiento el 2025, si es que no surgen nuevos problemas.

“El gobierno regional tiene todo a su favor para ganar ese arbitraje y luego disponer la culminación de la obra, estamos hablando de que en el 2025 podría estar operativo”, dijo Ortega.

La obra del hospital de Cotahuasi estuvo presupuestada en 39 millones 800 mil soles, pero terminará costando varios millones de soles más.

La misma situación se presenta en el hospital de Camaná. El gobierno regional ya tomó el control de la obra tras rescindir el contrato con el consorcio empresarial. Ahora se espera que las obras físicas concluyan en abril del próximo año y recién el 2025 empiece a brindar atención.

“Ha sido muy difícil tomar el control de la obra, pero ya se está avanzando en retomar los trabajos. Lamentablemente no se puede hacer de inmediato”, dijo la consejera por Camaná.

En su momento se denunció que el consorcio a cargo de la obra habría realizado una especie de “maquillaje” en la obra del hospital de Camaná para simular avances y luego cobrar. Se colocaron falsos pisos y acabados para hacer creer que estaban avanzando, pero no era verdad.

Esta obra fue licitada en 77 millones de soles, ahora se estima que la inversión bordee los 100 millones de soles.

Camaná fue una de las provincias más golpeadas por la plena pandemia de la Covid-19. Se tuvo que habilitar camas en el terminal terrestre. Si el nuevo hospital habría acabado en el tiempo previsto, se pudo haber salvado muchas vidas durante esos momentos difíciles.

CONO NORTE

La situación más complicada de las obras de salud abandonadas está en el hospital Maritza Campos del Cono Norte. Este proyecto tardaría al menos un año y medio más para ser concluido.

“No tiene ni un 50% de avance y falta mucho para que la obra esté lista, pero lo que también preocupa es que se compraron equipos y en la vista que realizamos comprobamos que en algunas cajas hay otros materiales y no los equipos médicos. Por ejemplo, en una caja que dice ecógrafo hay riñoneras. Eso es grave y esperamos se determiné qué pasó”, dijo Ortega.

El hospital Maritza Campos ayudaría a descongestionar la demanda de pacientes en los hospitales Goyeneche y Honorio Delgado porque allí se atendería la población de todo el Cono Norte.

Ortega dijo que se deben establecer responsabilidades penales contra los responsables de que esta obra se haya desarrollado con tantas irregularidades.

Lo que también llama la atención es que todas estas obras fueron iniciadas y abandonadas por el mismo consorcio empresarial que encabeza la empresa Eralma Constructora SAC.

En el caso de Maritza Campos se reveló que la gestión de la exgoberadora, Kimerlee Gutiérrez, le desembolsó 23 millones de soles al consorcio antes de dejar el cargo, pero no se hizo nada en la obra.

En la región existe una gran necesidad de mejorar los servicios de salud, pero el abandono de las obras hospitalaria son una demostración de que cuando se involucran intereses particulares y posibles actos de corrupción, los perjudicados son los pacientes que tienen que madrugar por una cita en los viejo hospitales Goyeneche y Honorio Delgado.