UN GRABADOR QUE SOPRENDE
Por Julio Lopera Quintanilla. (*)
Pensando en los artistas del grabado de nuestra natal Arequipa recordé el trabajo y la trayectoria de José Andrés Lara Quilla, un artista que se caracteriza por una obra concisa construida no desde la descripción de los detalles sino desde la subjetividad, desde la contemplación de un artista que construye imágenes y escenas partiendo de sus propias visiones personales logrando con estas una expresividad que sorprende.
Lara Quilla se inició con una obra centrada en una temática vinculada a la Cultura Antigua del Perú para dar más tarde un giro inesperado hacia una temática intimista muy vinculada al contexto familiar, muchos recuerdos de infancia que evocaría también lo llevaron al paisaje urbano.
José Andrés es Licenciado en Artes, Especialidad Plásticas por la Universidad de San Agustín donde ejerce la docencia universitaria.
El maestro Lara ha participado en varias exposiciones a nivel local habiéndose hecho acreedor en Arequipa al III Premio en los concursos que organizaba Michell y Compañía (1988 y 1993) También ha participado en varias exposiciones individuales y colectivas a nivel regional, nacional e internacional. Ha expuesto en Chile, Suiza y Alemania. Va la conversación.
¿Qué es el arte para ti?
Cuando yo era niño creía que el arte era solo un juego, por eso dibujaba. Pasada mi niñez pensé que el arte era solamente cuestión de habilidad. Cuando ingresé a la universidad me di cuenta que el arte es más que habilidad, comprendí que el arte en general y el dibujo en particular está en un mensaje estético que busca hacer saber a los demás lo que uno siente, comprendí que este compartir puede afectar a los otros y puede hacer que estos cambien. Entendí que eso es el arte. El arte no es fácil como muchos creen, requiere mucho esfuerzo, el arte te expone como persona.
¿En qué consiste la disciplina del grabado?
Técnicamente, el Grabado es similar a la impresión con sellos; se imprime la imagen manualmente, en distintas matrices (madera, metal, cartón, yeso, etc.) y luego se imprime a blanco y negro o a colores. El Grabado artístico es una técnica muy especial, hay una presencia evidente de los materiales en los resultados, uno tiene que ser consciente de lo que puede hacer y las limitaciones que el trabajo le impone, la motivación es importante para un resultado distinto. La grabación es una técnica que populariza el arte, por su multiplicidad por su poder de difusión y su facilidad de acceso y adquisición, ello debería tomarse más en cuenta, hay que apreciar la oportunidad que ofrece al público como a los artistas que se interesen en esta forma de arte.
¿Cómo nació en ti la inclinación por el grabado?
Fui afortunado, en mi deseo de seguir aprendiendo busqué estar durante mis primeras vacaciones en un curso de verano que impartió uno de los profesores, no podía pagar el curso de verano y hablé con el profesor (Miguel Espinoza) explicándole mi problemática económica y fui aceptado. Trabaje dos meses ayudándole en los cursos de litografía y grabado en metal y en su propio trabajo, en realidad fue un regalo, una oportunidad, descubrir (a los 17 años) el quehacer diario de un artista y vivir en un ambiente de arte, allí le tome respeto y aprecio al grabado.
¿Dónde te formaste?
Estudié en la Escuela de Artes de la UNSA, pero y sobre todo, en mi formación, tuvo mucho que ver el apoyo de algunos profesores, el taller de verano de Miguel Espinoza que posteriormente falleció, luego tuve el apoyo del maestro Luis Solorio, con quien trabaje al termino de mis estudios. Luis creó un Taller de Arte, Intermezzo, en el que colaboré, e hicimos grabados de varios artistas de Lima, luego cambió a Taller Lluvia de Sol y allí hicimos papel reciclado para imprimir nuestros grabados, por allí pasaron muchas personas que hoy hacen grabado. Todo ello ha forjado la formación que tengo.
¿Quiénes son tus mayores referentes?
Son muchos, Brueghel, Corot, Bonnard, Chagall, Gauguin, los grabados japoneses, los expresionistas alemanes, Alejandro Alayza, Szyzslo, Humareda, Vinatea Reinoso, Luis Solorio…, empecé admirando como todos a Leonardo da Vinci, pero, eso era por que no conocía al principio a nadie más. Cuando era estudiante de primero, me mostraron la obra de Otto Dix y tuve un cambio drástico en mi manera de ver el arte, tuve una apertura que me permitió acercarme a la obra de muchos artistas, desde ese momento he ido descubriendo a más artistas que me dejan impresionado con su trabajo.
¿Cómo creas tus grabados? ¿Qué etapas tiene tu proceso creativo?
Son distintos los procesos que me llevan a realizar mis obras, no existe hábitos, o al menos no creo tenerlos, le tengo miedo a caer en repeticiones, no hay fórmulas, busco crear condiciones en cualquier situación.
Cuando no estoy grabando o pintando, realizo muchos dibujos espontáneos que guardo y recurro a ellos cuando estoy algo desorientado, otras veces, realizo mis dibujos directo en el soporte o madera, este proceso me gusta mucho, dibujo y corrijo y progresivamente, defino el dibujo como algo que estoy descubriendo, que, a pesar de haber decidido por una escena la mayoría de veces esta va cambiando en relación a su aspecto inicial; lo que no cambia es la intención inicial, es decir, si quiero representar un personaje o un paisaje con un determinado carácter o sensación, puede cambiar la forma, pero no el carácter o sensación.
Mientras voy realizando el grabado siempre evalúo lo que estoy haciendo y hago cambios. Es en esta etapa en la que saco las pruebas de impresión y en la que realmente tomo las mayores decisiones de como culminar el trabajo.
¿Cuáles son tus técnicas preferidas? ¿Por qué?
En Grabado, la Xilografía, porque es una técnica que me permite manejar un dibujo conciso, un lenguaje que en su sobriedad me permite ser sencillo y profundo a la vez.
¿Qué conceptos te interesa trasmitir?
Mis trabajos casi siempre, son representaciones que parten de mis recuerdos, motivado por sensaciones presentes, no busco hacer representaciones descriptivas, sino significativas. En realidad, no conceptualizo mucho mis trabajos, las ideas giran alrededor de las escenas, busco que la imagen se acerque a lo que espero lograr. No niego que existen ideas previas, pero no ideas rígidas, en el proceso las ideas se van definiendo, eso sí, no creo en una obra al azar, ya que considero que nunca debe perderse el control de lo que sucede en la imagen, que existen cambios o mejoras de la idea en el proceso, es normal y eso, es lo que hace del trabajo más complejo, apasionante, permitir que podamos descubrir y mostrarnos como somos, con lo que hacemos.
(*) Centro Cultural Unsa.