Decenas de viviendas inundadas tras el desborde de ríos en Puno

Intensas lluvias dejan aisladas a varias familias. Autoridades intentan desviar el agua al lago Titicaca, pero los pobladores temen que la situación empeore si las lluvias continúan.
FAMILIAS AFECTADAS EN JAYLLIHUAYA Y SALCEDO
Decenas de familias se han visto afectadas con la inundación de sus viviendas en el centro poblado Jayllihuaya, tras el desborde del río del mismo nombre, ubicado en la provincia y región Puno. Las fuertes lluvias registradas desde la tarde hasta a medianoche del lunes 10 de marzo, dejaron aisladas varias viviendas por el aniego de las calles.
Adultos mayores y niños quedaron atrapados en sus casas, sin poder salir debido a la inundación que ha convertido los márgenes de la avenida Orgullo Aymara en una laguna. Durante la madrugada, los vecinos intentaron canalizar el agua por cuenta propia, incluso, algunos contrataron maquinaria pesada para abrir un desagüe y evitar mayores daños, pero el esfuerzo no fue suficiente.
La preocupación aumentó porque el agua siguió avanzando y alcanzó las viviendas.
El personal de la Municipalidad Provincial de Puno inspeccionó el lugar y coordinaron algunas acciones de emergencia. Así, se dispuso el uso de maquinaria para abrir una canaleta para drenar el agua estancada y se iniciaron los trabajos de descolmatación del río Jayllihuaya para desviar el flujo de agua hacia el lago Titicaca.
El alcalde Javier Ponce Roque se comprometió a brindar apoyo a los damnificados.
Una situación similar vivieron los vecinos del centro poblado Salcedo. En los jirones Cipreses y Rosales, el desborde del río Salcedo afectó a unas 40 viviendas, cuyos moradores han solicitado apoyo urgente a las autoridades.
En los últimos días las lluvias generaron varios estragos. El último domingo, 40 viviendas del barrio Villa Verde también se inundaron, varias estructuras de adobe colapsaron y el puente en el jirón Agua es Via colapsó.
Los afectados exigen a Defensa Civil de la Municipalidad Provincial de Puno que intervenga con la limpieza del río desde la parte alta hasta la parte baja del centro poblado y que canalice la avenida Orgullo Aymara para prevenir futuras inundaciones.
Vecinos de la zona señalaron que la empresa Emsapuno también tendría responsabilidad en el desastre, ya que dejó un forado sin reparar en el mismo jirón, agravando la acumulación de agua y su posterior desborde.