Por: Carlos Meneses

La misión de la SIP hace bien en visitar Perú, dialogar con periodistas y con el Gobierno para asegurar respeto a las libertades ciudadanas.

Ha hecho bien la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) en reunirse con instituciones representativas peruanas, primero con representantes del Poder Judicial para terminar con una cita con la presidenta Dina Boluarte.

Cinco miembros de la organización periodística se alarmaron y decidieron venir a Perú entre el 10 y el 12 de marzo para averiguar cómo está la relación de los poderes públicos con el gobierno peruano. La delegación representativa es liderada por el presidente de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) quien está acompañado por otros cinco personajes que pertenecen a distintos medios de América.

La SIP pretende que la presidenta peruana garantice al periodismo del continente que respeta los derechos y libertades de la prensa independiente. Las molestias comenzaron hace meses cuando la mandataria Boluarte suspendió todo diálogo directo con la prensa peruana al no formular declaraciones ni responder preguntas.

En los últimos días la situación empeoró especialmente con el periodista Gustavo Gorriti a quien el gobierno desea aplicar sanciones a través del Ministerio Público.

La misión de la SIP se reunirá con el Consejo del Prensa Peruana y ha pedido dialogar con la Iglesia a través del Consejo Episcopal para que medie en defensa de las libertades públicas.