Por Carlos Meneses

Lima ayer tuvo un caos por el problema de ausencia de transporte colectivo de pasajeros. Se anuncia un nuevo paro nacional para dentro de dos semanas.

El paro de transportistas paralizó las actividades de Lima en la mañana de ayer, a pesar de ello ocurrió un nuevo atentado cuando extorsionadores dispararon contra un vehículo que llevaba pasajeros. Afortunadamente no murió nadie, pero el Ministerio de Trabajo tuvo que ordenar flexibilidad horaria de tres horas; se convino en regularizar horarios por las tres horas perdidas en los centros laborales.

También ocurrieron incidentes en la Panamericana norte cuando los ómnibus de las empresas chinas que sirven a Lima se enfrentaron con agentes policiales durante una marcha que pretendió llegar al centro de esa ciudad.

Se ha anunciado que habrá nuevas paralizaciones en la exigencia de pedir acciones eficaces para detener los excesos delincuenciales y calmar la furia de los transportistas formales o informales. Los vehículos que intentaron remplazar las ausencias en las rutas de Lima fueron amenazados otra vez y el Ministerio de Transportes no pudo encontrar solución a la problemática creada.

En 15 días más habrá un nuevo paro, esta vez a nivel nacional, reclamando atención real por parte de la Policía Nacional y de las Fuerzas Armadas.  

Se exige que el Ministerio del Interior, con el apoyo de la Fuerza Armada, actúe con eficiencia para detener los afanes extorsionadores y el cobro de cupos que ya resultan impagables para la mayoría de los transportistas, bodegueros y también profesionales médicos que ahora son amenazados hasta en las casas donde visitan a sus pacientes.