SIN AMBAGES

Ya está aquí el tiempo en el que tu calendario se llena de reuniones navideñas en el trabajo, con amigos cercanos y de toda la vida, y con amigos que no vemos nunca pero que llegan para estas celebraciones y ¡cómo no nos vamos a ver, aunque sea un ratito! Y también están esos intercambios de regalos para los que no tienes idea de qué comprar, pero ya dijeron que no pueden ser tazas ni agendas para el próximo año. De una u otra manera, ahí estás, en el almuerzo navideño y en la cena de la empresa a la que no querías ir, pero te han dicho que el jefe, esta vez, ha comprado regalos que valen la pena.

Quizá en esa bolsa pomposa de colores y figuras en alto relieve que te ha tocado, encuentras algo que sí te gusta. Si no, disfruta de todas formas esas reuniones y, si aparece el simpático de los comentarios «inofensivos», tómalo con calma.

Ese simpático es aquel que se divierte haciendo comentarios poco agradables a otras personas, pero como hay de por medio una risita que intenta, por si acaso, alivianar lo que acaba de decir, entonces ya no parecen tan desagradables, porque es solo una broma, ¿o no? Es ese “te veo más rellenita, pero siempre igual de bonita; ja, ja, ja; no te me ofendas, pero si es solo una broma”. Y como colofón de su broma sin gracia, las risas de los que alcanzaron a escucharlo, como para quedar bien o simplemente por inercia; y quien recibe el comentario en bolsita navideña color si-es-solo-una-broma sonríe con incomodidad, y ya en casa pensará en esos comentarios con sarcasmo que vienen a la cabeza un par de horas después y ¡cómo no se me ocurrió en ese momento!

En algún lado, encontraremos a ese simpático que lanza la piedra envuelta en papel de regalo. Si lo encontrara yo y me hace uno de esos comentarios a manera de broma de mal gusto como su perfume, le diría que no he entendido el chiste y que no quisiera quedarme con la curiosidad, entonces, que me lo explique. No sé qué me diría, pero sí me da curiosidad ver qué se inventa y ver si se da cuenta de su sinsentido.

Si te parece que una broma podría no ser agradable, entonces, no la hagas y punto. Vamos, por ahí debes tener guardado algún buen chiste como para que el resto te celebre, si eso es lo que buscas; pero que no sea otra persona el tema principal de tus comentarios, especialmente si no tienes la certeza de que va a tomar tu broma con agrado genuino. Ahora, si es tu amigo de toda la vida y quien también te hace bromas a ti y así los dos son felices, esa es otra parte de la historia. Que los demás se rían no significa nada; si te parece que tu comentario podría no caer bien, no lo hagas. Busca algo más para decir, porque algo de gracia debes encontrar por ahí, ¿o no? ¡Es solo una broma!.