Los artesanos nos revelan sus técnicas artísticas y cómo cuidar de nuestros misterios.

Por: Danna Felipe B.

En el estadio Melgar se ofrece una amplia variedad de nacimientos cuyas piezas son trabajadas con la dedicación y delicadeza de quien crea arte con sus manos. Hay belenes hechos con cerámica, hueso y yeso, de menos de 5 cm hasta cerca de un metro, desde el tradicional characato hasta algunos que incluyen llamas e incluso un oso polar. Así, los artesanos extienden una muy cordial invitación a todos los interesados en regalar, renovar o tener su primer nacimiento propio a pasear por los pasillos de este mercado al aire libre. Están seguros de que un ejemplar los enamorará.

Diario El Pueblo recorrió una de las ferias artesanales más grandes del centro de la ciudad para ahora informarte sobre la diversidad de nacimientos y sus respectivos precios, buscando optimizar así tu tiempo en estas fechas con mucho trajín.

YESO

Los nacimientos hechos con yeso son los más accesibles. Los tamaños de este material se clasifican del 0 al 7. Estas piezas provienen de talleres blancos, donde cada pieza es moldeada y lijada al detalle para luego ser pintada con óleo y duco. Cada color es una mezcla cuidadosamente seleccionada para crear armonía entre las piezas, las cuales presentan acabados en dorado y barniz; este último evita que se cubran de polvo.

El pesebre más pequeño fue cotizado en S/ 20 y consta de 6 piezas (María, José, los tres reyes magos y Jesús). Con el mismo número de figuras, el 1 está en S/ 30 y el 2 en S/ 43. Desde el 3 encontramos misterios completos. El 3 vale S/ 170, con un total de 12 piezas; a las 6 ya mencionadas se suman tres pastores, vaca, burro y la cuna del niño. El 4 tiene un precio de S/ 220 y el 5 de S/ 265, con la misma composición que el 4. No se ubicó ningún ejemplar del 6, por lo que finalmente, el 7 se vende por S/ 550; incluye 8 figuras (María, José, el niño con manos de resina, tres reyes magos, vaca y burro).

Todos estos nacimientos son del modelo más tradicional, con diferencias en acabados como brillantina o retazos de tela.

CERÁMICA

En este material hay una mayor diversidad de modelos, pero los tamaños son más limitados.

Sus artesanos moldean arcilla y, también como en el material anterior, manejan sus propios moldes, en los cuales hornean sus piezas para que una vez duras sean pintadas con acrílicos o esmaltes, aunque esta última pintura tiene un mejor acabado si se aplica antes de que entre al horno. A unas figuras se les echa barniz.

El nacimiento más grande encontrado en este material es el tradicional arequipeño, en el cual María, José y el niño lucen sus sombreros de paja palma macora, a S/ 190. También incluye vaca, burro, oveja y cuna. Es importante aclarar que el accesorio de la cabeza es separable.

Para salir de Arequipa, del continente americano y de lo tradicional, hay opciones como el misterio ayacuchano o el Ártico. El primer ejemplar está en S/ 60 y comprende María, José, vaca, burro, los tres reyes magos, el niño y su cuna. La misma opción, pero más grande y con, en vez de vaca y burro, dos llamas, cuesta S/ 150. El segundo pesebre lo encontramos desde los S/ 35; María, José y su bebé están bien abrigados. Junto a ellos se alza un iglú y animales de frío.

Es necesario subrayar que los belenes de igual tamaño, sin importar el modelo, tienen precios similares.

HUESO

El hueso es el material más costoso debido a su elegancia.

Lamentablemente, se nos hizo imposible ubicar a alguien que se dedique a su fabricación. A todos quienes les consultamos, nos afirmaron que los compran ya hechos y acomodados en sus respectivas cajas rojas.

Los tamaños más comunes en los mostradores son los que miden aproximadamente 40 cm y 50 cm, con precios de S/ 1 150 y S/ 2 500, respectivamente.

¿CÓMO GUARDARLOS?

Puede parecer una pregunta sencilla, pero es constante que personas lleguen al estadio consultando si se puede reparar a su niño u otra pieza de su nacimiento, pese a que su vida útil ha sido muy corta.

Por eso, nuestros entrevistados coincidieron en que es importante guardar cada pieza primero dentro de una bolsa adecuada a su tamaño para evitar que el periódico manche los rostros o las prendas claras de las vestimentas. Después, se debe envolver cada figura con abundante papel.

Para el niño, se recomienda formar una bola de papel, colocándola luego entre las piernas y los brazos de la figura. En el caso de tener un ángel, es necesario proteger también las alas con periódico. Este mismo procedimiento debe aplicarse a todas las piezas con características frágiles. Es pertinente contar con una caja acondicionada con telas, que pueden ser ropa vieja, donde se colocará cada figura de manera segura. Finalmente, la caja debe guardarse en un lugar adecuado.