A pesar que el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (Midis) tiene la responsabilidad de garantizar la atención a la población en mayor riesgo social y económico, el déficit de presupuesto estaría impidiendo que esta ayuda llegue a todas las comunidades que la necesitan. El Programa Nacional Plataformas de Acción para la Inclusión Social (PAÍS), cuyo objetivo es acercar los servicios del Estado a las poblaciones más vulnerables, está dejando de lado a La Unión, la provincia más pobre de Arequipa.

Los ‘tambos’ son instalaciones equipadas para brindar atención social y acceso a servicios del Estado, gestionadas por los programas del Midis y otras entidades gubernamentales. Actualmente, Arequipa cuenta con 17 tambos instalados en las provincias de Caylloma, Caravelí, Condesuyos y Castilla. Aunque estos centros están diseñados para asistir a las poblaciones en zonas remotas y de difícil acceso, La Unión –la provincia con mayores índices de pobreza en Arequipa– no cuenta con un solo tambo.

«Todos nuestros tambos están ubicados en zonas por encima de los 3,600 m.s.n.m. Estos espacios ayudan a dar soporte a la población. Conocemos la problemática en La Unión, pero debido a nuestra reducida asignación presupuestal, no se logró instalar un tambo allí. Este procedimiento requiere aproximadamente S/1 millón 500 mil de presupuesto. Este costo se incrementa además debido a la distancia», explicó Juan Luque Uchuchoque, coordinador regional del Programa Nacional PAÍS del Midis.

El Midis ya ha identificado los distritos de La Unión que necesitan tambos, como Cayarani, Ayca, Charcana, Puyca y Huaynacotas. Sin embargo, la insuficiencia presupuestaria hace inviable la instalación de nuevos tambos en esta provincia. Aunque a nivel nacional existen 512 tambos, en Arequipa el último tambo fue instalado en 2017. Este retraso refleja una aparente falta de voluntad del Midis para cerrar las brechas de acceso a servicios básicos en las zonas más necesitadas.

El déficit presupuestario no solo afecta a La Unión sino también a otras regiones con necesidades urgentes. A medida que se profundizan las desigualdades, es crucial que el Midis revise y ajuste sus políticas y estrategias de distribución de recursos para asegurar que todas las provincias, especialmente las más pobres, reciban la atención que merecen.