Boluarte en Davos
Por Carlos Meneses
La presidenta aprovechó su presencia en Davos para magnificar los favorables resultados económicos que parecen venir en el 2025 y la convocatoria a elecciones para el 2026.
Como para evidenciar que el propósito presidencial peruano de tener presencia en la cita mundial económica de Davos no era necesario ante los problemas políticos y sociales peruanos, la presidenta tiene como único acto oficial una conferencia de prensa en la que se ha dedicado a resaltar la posibilidad de que Perú sea tan importante para el mundo como los Estados Unidos y el Japón.
Nuestra mandataria ha hecho gala de la situación económica favorable que está recibiendo Perú para el 2025 y tenido a su costado al ministro de Economía, José Arista y al canciller de la República.
Antes de que ocurriera dicha reunión la mandataria pasó un momento desagradable cuando un grupo de peruanos hizo una manifestación de protesta por su presencia y por los problemas no resueltos en el país.
Es que la presidente no es una experta en economía y en consecuencia lo que está pasando era previsible, no va a tener una intervención lucida y brillante en la cita internacional de Suiza, pero está allí a pesar de que en Perú la requerían con urgencia para contemplar las consecuencias de un atentado terrorista en Trujillo que ha causado daños en el Ministerio Público y en edificios vecinos.
Las metas trazadas por la señora Boluarte no han sido cambiadas, quería ir a Davos y lo ha hecho al margen de toda consideración nacional que recomendaba no ir a tal cita frente a la situación que se confronta aquí.
