Por: Dany La Torre

En medio de un clima laboral problemático, el subprefecto provincial de Arequipa Juan Carlos Jaquehua Villalobos, decidió renunciar de forma irrevocable desde el 1 de agosto de este año. Denunció que, durante su gestión, no halló condiciones adecuadas de trabajo como la falta de personal de apoyo administrativo, internet, equipos informáticos, caja chica para gastos de representación y gestión, así como un presunto hostigamiento laboral por parte del prefecto regional de Arequipa, Yeremi torres.

“Se ha desmantelado la subprefectura, (por ejemplo) antes había un asesor que se pagaba por terceros, cuando yo asumí, fue retirado el asesor y fue pasado a la prefectura, en donde, dicho sea de paso, tienen seis personas nombradas y un abogado por terceros pese a que la carga procesal no es tanta, en cambio, en la subprefectura si se atiende gran cantidad de casos, pero no se cuenta con ni un centavo de la caja chica, yo tuve que pagar mis taxis, de mis recursos para arreglar las computadoras malogradas, pague mi internet y tuve que traer la impresora de mi casa para trabajar”, lamentó.

Para Jaquehua, esta situación tiene sus orígenes en la injerencia de la cuestionada docente y militante del Partido Magisterial Popular (PMP) en Arequipa, Rosa Luz Pérez Ramírez. “Cuando tomamos el cargo, ya en funciones, fuimos convocados por el prefecto a una supuesta reunión y encontramos a la señora despachando, le dijimos las cosas como era, desde entonces, en los días posteriores hubo un hostigamiento, el prefecto dijo que teníamos que buscar nuestro propio local”, añadió.

El saliente funcionario explicó que, en un principio, advirtió a Torres que no quería la influencia de Pérez Ramírez en la subprefectura de Arequipa. No obstante, este último personaje habría tenido una participación continua en reuniones oficiales de la entidad. Incluso, participó del Consejo de Ministros Descentralizado que se llevó a cabo en Arequipa. Al respecto, este diario intentó comunicarse con el Prefecto Yeremi Torres para conocer sus descargos, sin embargo, no obtuvimos respuesta alguna.

“Nosotros le presentamos (a Yeremi Torres) las diligencias que encontrábamos con los informes correspondientes por resolver, también la falta de personal administrativo de apoyo y las condiciones mínimas de trabajo, hemos indicado la necesidad de trabajar en equipo y coordinar, se lo hemos dicho de manera documentada, lamentablemente no se tomaron las medidas para apoyar y trabajar en equipo”, agregó.

Del mismo modo, consideró que esta aparente crisis en la Prefectura Regional de Arequipa, se debe a la manipulación de Pérez Ramírez. Además, agregó que esta se encargaría de nombrar a prefectos y subprefectos en la región Arequipa. “Nosotros esperamos que se tomen las medidas correctivas”, dijo Jaquehua.

Cabe señalar que esta no es la primera vez que Rosa Luz Pérez es vinculada por un presunto tráfico de influencias. En junio de este año, los padres de familia del colegio Independencia Americana, denunciaron a la docente por una presunta agresión en contra de un escolar. En ese entonces, también se le acusó por intentar amedrentar a los representantes de APAFA argumentando que tiene influencias en el actual Gobierno de Pedro Castillo.