La tarea es salvar el país
Por: Carlos Meneses
“En las regiones podemos empezar el movimiento de unidad nacional que parece no encontrar la capital de la República”.
A los arequipeños les corresponde la gran tarea de devolver la unidad, de permitir la conversación y de liderar la vuelta a un país que teniendo problemas quiere superarlos en base al cerebro y al corazón.
En las vísperas de nuestras fiestas jubilares queremos recoger el sentir de los aquí nacidos y de todos los que han contribuido a la presencia histórica de Arequipa en la vida del Perú para que juntos alentemos la idea de conversar y buscar vías de conexión entre la forma de pensar de quienes defendieron la República, durante 200 años, respetando el mandato de los pueblos y cuidando de nuestras instituciones tutelares.
Es verdad que el deterioro que se advierte es consecuencia de un proceso que empezó hace décadas que no supo entender nuestra diversidad o que quiso imponer cambios que pueden ser necesarios ahora y que no fueron advertidos o adecuadamente tratados antes.
Están presentes y existen realmente, pero no para separarnos sino para unirnos. La única forma de entendernos es sentarnos a la mesa y sin trampas procurar arreglos mínimos y satisfactorios para mayorías.
Habrá quienes discrepen y eso es parte de la democracia, pero las diferencias se resuelven con los votos de las mayorías reales y ajustadas a la ley. ¡Qué podemos hacerlo, no hay ninguna duda!
Si en Lima no pueden entenderse los poderes, sí podemos organizar que en las regiones renazca el espíritu de unidad y de entendimiento.
Debemos considerarnos y vernos como lo que somos un país de hermanos y entre hermanos pueden haber discrepancias, pero no guerras. Nadie tiene que morir por querer vivir y la decisión de todos debe ser no solo sobrevivir sino, tomándonos de las manos, caminar hacia adelante sin lesionarnos, pensando en el futuro de los que vienen y en el porvenir de los niños.