Fiestas de fin de año pueden detonar brote de influenza A H3N2
Por Germán Yuca Ch.
La circulación de una nueva variante detectada en América del Norte y Europa preocupa a las autoridades sanitarias. En el Perú, y en Arequipa el riesgo se mantiene leve a moderado, pero la baja vacunación podría agravar el impacto.
INCREMENTO DE VIAJES Y AGLOMERACIONES ELEVA RIESGO
Las celebraciones de Navidad y Año Nuevo, con su característico movimiento masivo de personas, podrían abrir la puerta a un nuevo brote de gripe en el país. El virus de la influenza A H3N2 subclado K, detectado recientemente en Latinoamérica, ha mostrado una rápida capacidad de propagación y ya provocó picos de contagio en Europa y Estados Unidos. En el Perú, el Ministerio de Salud (Minsa) mantiene la alerta epidemiológica y advierte que los bajos niveles de vacunación en los grupos de riesgo podrían derivar en cuadros graves e incluso fallecimientos.
El ministro de Salud, Luis Quiroz, confirmó que, si bien no se han identificado casos del subclado K en el territorio nacional, sí se registran infecciones por influenza A (H3N2). “El riesgo de un brote en el país es leve a moderado, pero debemos tomar precauciones porque la alta movilidad en diciembre facilita la transmisión”, señaló.
VIRUS ALTAMENTE MUTABLE
La influenza A H3N2 pertenece a un grupo de virus con una alta capacidad de mutación. Su nueva variante, conocida como subclado K, circula simultáneamente con otros virus respiratorios, generando una carga combinada en los sistemas de salud. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), esta cepa ha adelantado en varias semanas los picos gripales en Europa, un comportamiento que podría replicarse en América Latina.
La detección del subclado K en México encendió las alertas regionales, ya que la movilidad internacional eleva la probabilidad de su ingreso a Sudamérica. De hecho, en países como Estados Unidos, Canadá, España y Alemania, el virus provocó un incremento sostenido de hospitalizaciones, sobre todo en adultos mayores y niños.
“Lo que preocupa no es solo la velocidad de transmisión, sino la combinación con otras infecciones respiratorias como el virus sincitial o el COVID-19 residual. Esto puede agravar los cuadros clínicos en pacientes vulnerables”, explicó la infectóloga María del Pilar Cárdenas, consultada por El Pueblo.
VIGILANCIA REFORZADA Y DETECCION LIMITADA
Ante este escenario, el Minsa activó un plan de vigilancia epidemiológica nacional para detectar posibles casos importados. Se realiza un seguimiento especial a los vuelos internacionales, principalmente desde Norteamérica y México, donde el virus circula activamente.
Sin embargo, en regiones como Arequipa, las autoridades sanitarias enfrentan una limitación técnica: la identificación del subclado K requiere pruebas moleculares específicas que solo se procesan en Lima, en el Instituto Nacional de Salud (INS).
“Ante un caso sospechoso, debemos enviar las muestras a la capital. Esto retrasa la confirmación y la respuesta local, lo que podría complicar la contención en caso de brote”, reconoció un funcionario de la Gerencia Regional de Salud (Geresa).
DICIEMBRE: VIAJES, FERIAS Y REUNIONES
El mes de diciembre constituye un escenario ideal para la propagación del virus. Miles de personas se desplazan entre regiones, los centros comerciales y ferias navideñas se llenan de público, y las celebraciones familiares y laborales multiplican las aglomeraciones.
“El virus de la influenza se transmite fácilmente por gotas de saliva o superficies contaminadas. Un solo portador asintomático puede contagiar a decenas en espacios cerrados, especialmente cuando hay poca ventilación”, explicó el médico epidemiólogo Juan Carlos Herrera.
A esta situación se suma el inicio de la temporada de lluvias, que tradicionalmente incrementa la incidencia de infecciones respiratorias agudas (IRA). En 2024, Arequipa registró más de 70 mil casos de IRA, una cifra que podría superarse si el nuevo subclado ingresa al país sin un nivel adecuado de inmunización.
SÍNTOMAS Y COMPLICACIONES
La influenza A (H3N2) presenta síntomas similares al resfrío común, pero más severos y de rápida evolución: fiebre alta, tos seca, dolor muscular, congestión nasal, fatiga intensa y, en algunos casos, trastornos gastrointestinales.
En los grupos de riesgo —niños menores de 5 años, adultos mayores, gestantes y personas con enfermedades crónicas— la infección puede derivar en neumonía o insuficiencia respiratoria. En Europa, la circulación del subclado K ha coincidido con un incremento del 30% en hospitalizaciones por complicaciones respiratorias.
“El problema no es solo la enfermedad aguda, sino el colapso de los servicios de salud por la coincidencia de virus respiratorios. Una gripe mal tratada en un adulto mayor puede terminar en una neumonía fatal”, advirtió Herrera.

VACUNACIÓN INSUFICIENTE EN AREQUIPA
Pese a las advertencias internacionales, las tasas de vacunación siguen siendo bajas. En Arequipa, la Geresa informó que solo 55% de los mayores de 60 años han recibido la vacuna contra la influenza, de una meta de 120 mil personas. En el caso de los niños menores de seis años, la cobertura alcanza cerca del 79%, aún por debajo del estándar recomendado por la OMS (90%).
“Los adultos mayores muchas veces no acuden a vacunarse porque creen que ya no es necesario o confunden la influenza con un simple resfrío. Pero la vacuna sigue siendo la medida más eficaz para evitar cuadros graves”, afirmó la gerenta regional de Salud, Maritza Pacheco.
El ministro Luis Quiroz aseguró que el Estado cuenta con dosis suficientes para cubrir a los grupos vulnerables. “En el Perú usamos la misma vacuna que en Estados Unidos y Europa, y es efectiva frente a la H3N2, aunque no haya una específica para el subclado K”, precisó.
No obstante, el reto no es la disponibilidad, sino la cobertura. En zonas rurales y andinas, la falta de acceso a centros de salud y la desinformación siguen siendo barreras importantes.
RECOMENDACIONES
Frente al incremento del riesgo, las autoridades sanitarias recomiendan extremar las medidas de prevención durante las celebraciones de fin de año:
- Evitar las aglomeraciones prolongadas en espacios cerrados.
- Ventilar ambientes durante reuniones familiares o eventos sociales.
- Usar mascarilla si se presentan síntomas respiratorios o se acude a lugares concurridos.
- Lavarse las manos frecuentemente y evitar compartir utensilios o bebidas.
- Acudir al centro de salud ante fiebre alta o dificultad para respirar.
“La vacunación, el lavado de manos y la ventilación siguen siendo las mejores herramientas. La pandemia nos dejó esa lección, y no podemos olvidarla”, recordó la epidemióloga Cárdenas.
Riesgo regional controlado, pero latente
Aunque Arequipa no registra casos del subclado K, las autoridades locales mantienen la alerta preventiva. El Hospital Honorio Delgado Espinoza y los establecimientos de salud de la red regional han reforzado sus protocolos de triaje respiratorio y notificación obligatoria ante cuadros sospechosos.
El Minsa, por su parte, informó que el sistema de vigilancia centinela está activo en más de 30 laboratorios del país. Las muestras sospechosas de influenza son derivadas al INS para su confirmación molecular.

“Estamos preparados para actuar rápidamente si se detecta la variante. Pero la respuesta ciudadana será determinante. Si no nos vacunamos y bajamos la guardia, ningún sistema puede contener un brote”, subrayó el ministro Quiroz.
La historia reciente demuestra que las fiestas de fin de año suelen ser un punto de inflexión epidemiológica. En 2022 y 2023, tras las celebraciones navideñas, los casos de influenza y COVID-19 se triplicaron en varias regiones. Este año, el contexto no es diferente: movilidad intensa, clima frío y vacunación insuficiente.
El riesgo puede parecer leve, pero el impacto sería alto si el virus encuentra terreno fértil. Los especialistas coinciden: la prevención y la inmunización son las únicas formas de evitar que diciembre se convierta en el mes de los contagios.
