Alertan sobre al funcionamiento del Centro Quirúrgico del hospital Alto Inclán de Mollendo.

A través del informe N.° 032-2025-OCI/0663-SVC, la Contraloría identificó graves deficiencias en el funcionamiento del Centro Quirúrgico del hospital Alto Inclán de Mollendo, en la provincia de Islay. Pese a su categorización II-E desde abril, el establecimiento carece de equipamiento para cirugías pediátricas, dispone de ambulancias incompletas y sin revisión técnica, y no garantiza atención quirúrgica de emergencia las 24 horas. Estas situaciones, en conjunto, reducen la capacidad operativa del servicio.

Una visita de control realizada entre el 20 y el 26 de noviembre de 2025 evidenció fallas que comprometen la calidad, seguridad y continuidad de la atención quirúrgica. Entre ellas, se constató que la sala de operaciones no cuenta con el equipamiento mínimo para cirugías pediátricas, como mantas térmicas, bomba perfusora, coche de paro con equipamiento pediátrico, coche de intubación difícil, fibroscopio y desfibrilador pediátrico. La ausencia de estos equipos limita la atención segura de menores y afecta la oportunidad del servicio.

Asimismo, se identificaron deficiencias en el Banco de Sangre. La Contraloría halló registros incompletos de temperatura y humedad ambiental, además de controles desactualizados en las conservadoras de sangre. En una de ellas no existen registros completos desde julio de 2025 y en otra se detectaron omisiones durante noviembre, situación que pone en riesgo la adecuada conservación de hemocomponentes y podría afectar a pacientes que requieran transfusiones durante procedimientos quirúrgicos.

El control simultáneo también evidenció problemas en el sistema de referencia y traslado. El hospital cuenta con tres ambulancias, ninguna con revisión técnica vehicular vigente ni póliza actualizada. Dos unidades presentan equipamiento incompleto y figuran registradas a nombre de una empresa privada. Esta condición resulta crítica debido a que el establecimiento no dispone de Unidad de Cuidados Intensivos y depende del traslado de pacientes a hospitales de mayor complejidad en Arequipa.

En cuanto a la atención quirúrgica, la Contraloría constató que el hospital no garantiza cirugías de emergencia las 24 horas, como exige su categoría. Solo dispone de dos anestesiólogos, programados en determinados días de la semana, lo que limita las intervenciones electivas a dos jornadas y deja sin cobertura otros días. A ello se suma que el servicio de radiología funciona solo 12 horas diarias, lo que reduce la capacidad de respuesta durante la noche.

Finalmente, el órgano de control observó una deficiente programación del personal del Centro Quirúrgico, con turnos en los que no se cuenta con el equipo completo de profesionales. En algunos casos hay anestesiólogo y cirujano, pero no personal de enfermería; en otros, personal médico y de enfermería, pero sin anestesiólogo. Esta falta de planificación impide optimizar los recursos humanos y disminuye la capacidad operativa del servicio.

Ante estos hallazgos, la Contraloría recomendó a la Gerencia Regional de Salud de Arequipa adoptar acciones correctivas inmediatas y comunicar, en un plazo máximo de cinco días hábiles, las medidas implementadas para superar las situaciones adversas detectadas.