Por: Carlos Meneses

“Los jóvenes y los niños esperan el cumplimiento del compromiso que se reinicia con la jornada electoral realizada. Lo cumpliremos todos porque de otra manera no seríamos tan bondadosos como para merecernos el eterno cielo azul que tenemos y la calidad extraordinaria de las mujeres y de los hombres que en esta tierra viven”.

El pueblo real y auténtico que decidió ayer participar del proceso electoral ha evidenciado que la democracia sigue siendo la mejor forma de escoger a los gobernantes y de confiarles la tarea de conducir hacia buenos destinos a quienes viven en la región, en la ciudad capital o en los distritos de todo el departamento.

Es la renovación de fe y en la creencia de que no todo el pueblo pueda equivocarse o que también un pueblo puede rectificar los errores cometidos en los regímenes que traicionaron promesas o que incumplieron compromisos.

Ahora solo queda cerrar filas alrededor de los ganadores legítimos o de escoger en los casos de segundas vueltas a los que resultaron favoritos. Son las reglas impuestas que se deben respetar y a las que se someten los gobernados, no debemos renegar de ellas porque pueden ser también las segundas oportunidades en las que no debe escogerse el mal menor sino procurar siempre el mejor camino para los siguientes años.

Confiamos en que la fe de la mayoría nos haya iluminado al momento de marcar la cédula, en mujeres y hombres que tuvieron oportunidad de difundir su mensaje y evidenciar su calidad y su ejemplo a los demás.

El cerrar filas significa también ponerse a la orden de los que ganen para colaborar con el gobierno, sea brindando ideas y cerebro o haciendo aportes para lograr las metas que tenemos por alcanzar para hacer de Majes una realidad y reiterar nuestro compromiso de contribuir como siempre lo hemos hecho con los destinos de una tierra a la que queremos de verdad.