La informalidad se profundiza en el Perú
Por: Martín Taype – El Montonero
Según el Informe Panorama Laboral 2022 de América Latina y el Caribe de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), difundido en su página web, la informalidad del empleo en el Perú es una de las más altas de la región alcanzando el 75% de los trabajadores; es decir tres de cada cuatro trabajadores en el Perú se encuentran en la informalidad.
Sobre el informe de la OIT, debo expresar mi preocupación. Crecimiento económico no implica necesariamente desarrollo económico y social de una nación, ni el fomento del empleo formal. Todos queremos una nación próspera y justa, con oportunidades de desarrollo para todos, donde el emprendimiento privado sea el motor del desarrollo. Para ello es indispensable promover la formalización de las micro y pequeñas empresas (mypes), que son las mayores generadoras de empleo en nuestro país, y las más golpeadas por los desastres naturales recientes. A la vez deben respetarse los derechos laborales y promover la negociación colectiva como un medio de diálogo y concertación entre empleadores y empleados.
Es indudable que el Covid-19 ha influido en el incremento de la informalidad en nuestro país. También las tensiones militares entre diversos países, como el conflicto en Ucrania, que han encarecido los precios de los cereales, fertilizantes, gas, petróleo. Estos factores exógenos han contribuido al cierre de muchos negocios y por ende profundizado la informalidad laboral, al incrementarse el desempleo. Pero también ha influido el contexto interno, como la creciente inseguridad ciudadana, las denuncias de corrupción en el ámbito público y privado, la inestabilidad política, las trabas burocráticas.
Por ello el Gobierno y las entidades públicas y privadas, respetando el marco constitucional y la estabilidad macroeconómica, deben tomar acciones para promover la formalización laboral, siendo proactivos ante el adverso contexto externo. Ello implica no cerrar las puertas a ningún país del mundo en el ámbito de los negocios, y promover el intercambio comercial sin injerencia política alguna.