ARGUEDAS, EL ESCRITOR
Por: Julio Lopera Quintanilla – Centro Cultural Unsa.
José María Arguedas, es uno de los más altos exponentes de la literatura peruana del siglo XX y el más grande escritor de la corriente Indigenista. Su narrativa, es una de las joyas de la literatura peruana. La producción literaria del novelista refleja la angustia y las esperanzas que se viven en el contexto de un país dividido en dos culturas, una quechua y una occidental. Arguedas, ha dejado a la posteridad grandes obras que han lo han llevado a las más altas cumbres de las letras peruanas. También nos ha dejado valiosísimos aportes en el campo de la etnología y de la antropología.
Nació Arguedas, el novelista del Indigenismo, en la sierra sur del Perú, vio la luz un 18 de enero de 1911, en una gran hacienda que su madre tenía cerca de Andahuaylas. Su padre, fue don Víctor Manuel Arguedas, un magistrado del poder judicial y su madre doña Victoria Altamirano, una dama de linaje criollo y aristócrata.
José María quedó huérfano cuando apenas tres años de edad. Pasó los primeros años de su vida en la solariega casa de Teresa Arguedas, su abuela paterna. Tiempo después del fallecimiento de la madre del niño, el magistrado contrajo matrimonio con Grimanesa Arengoitia quien tenía una finca en San Juan de Lucanas, departamento de Ayacucho.
El doctor Víctor Arguedas, quien fue siempre un padre ausente, pierde en los días del Oncenio de Leguía su empleo como magistrado del poder judicial y tiene que regresar a atender su estudio como abogado litigante. Mientras tanto, el pequeño José María, mantenía una relación muy difícil con su madrastra y también con Pablo Pacheco, su hermanastro, las relaciones eran tan malas que la abusiva madre le pegaba todos los días y su desprecio era tan grande que obligaba al niño a convivir con los criados indígenas. Su hermanastro cometía muchos abusos, pegaba y violaba a las mujeres, y obligaba al niño a presenciar las vejaciones que perpetraba, además Pablo le pegaba, es por ello, que el hermano aparece en la producción literaria de Arguedas personificando al gamonal abusivo, cruel y lujurioso.
En el fundo de la madrastra, los empleados de la hacienda por expreso encargo de la hacendada obligaban al párvulo a cuidar los becerros y también lo hacían ensillar el caballo de su hermanastro. Todo ello hizo que Arguedas odiara profundamente a su hermanastro. Poco tiempo después sin que su padre se enterase escapó de la hacienda de su madrastra a la estancia de su tía Zoila, allí, en compañía de su querida tía paso los años más felices de su vida.
El doctor Víctor Arguedas quien era un abogado de provincias llevó al niño en los viajes que realizó durante varios años por distintos pueblos, al final, luego de tantos periplos, el niño José María tuvo que quedarse solo mientras su padre continúo con el periplo que le exigían sus labores profesionales. Fue en esos tiempos en que su padre lo matriculó como interno en el Colegio Miguel Grau de Andahuaylas; allí cursó el quinto y sexto año de primaria. Esta etapa de su vida quedaría reflejada en su magistral novela Los Ríos Profundos.
En 1926, Arguedas realizó sus estudios en el Colegio San Luis de Gonzaga de Ica. Allí, cursó el primero y segundo año de educación secundaria, en esos año, él que iba a ser un gran novelista se enamoró de una joven llamada Pompeya, a ella dedicó hermosos poemas, pero Pompeya no aceptó tener una relación amorosa con él aduciendo que ella no enamoraba con serranos.
En 1928, el doctor Víctor Arguedas reanudó nuevamente sus viajes, residió entre Pampas y Huancayo; en esta ciudad, el adolescente estudió el tercer año de secundaria. Allí inició su camino por la literatura publicando como escritor de la juvenil revista Antorcha.
Arguedas, cursó en el Colegio Nuestra Señora de la Merced de Lima sus dos últimos años de educación secundaria entre 1929 y 1930. Más tarde, ingresó a la Facultad de Letras de la Universidad Mayor de San Marcos donde estudió Literatura, optando el título profesional de Licenciado en 1931. Posteriormente cursó etnología y se graduó de Bachiller en 1957. José María Arguedas estuvo en la cárcel entre 1937 y 1938 por participar en una protesta que hubo contra un de un enviado del dictador italiano Benito Mussolini. Tiempo después el gran escritor se hizo miembro del partido comunista.
Arguedas, tras el fallecimiento de su padre, a la par que realizaba sus estudios universitarios se vio obligado a buscar un empleo y consiguió un trabajo como auxiliar en la Administración de Correos.
José María ingresó al magisterio nacional en 1939. Comenzó en el Colegio Nacional Mateo Pumacahua, en el departamento del Cuzco, laboró allí entre 1939 y1941. En esos años, publicó Yawar Fiesta, su primera novela, descubrió también su vocación por la etnología cuando recogía con sus estudiantes información sobre el folclore de la localidad, esa inquietud lo llevó a estudiar también en San Marcos etnología, optó el grado académico de Bachiller en 1957.
Posteriormente, se desempeñó como profesor en los colegios Alfonso Ugarte, Guadalupe y Mariano Melgar en Lima. Arguedas laboró en este colegio hasta 1949, hasta que fue despojado de su puesto al ser acusado de comunista durante la dictadura del general. Odría. Este acontecimiento señaló el fin de su carrera en el magisterio.
Arguedas, realizó valiosos aportes sobre la danza de las diversas regiones del Perú en general y en particular de la danza de tijeras y del huayno. Sus artículos y ensayos sobre etnografía y folclore constituyen un legado y un aporte muy importante a la cultura nacional.
Arguedas, es un brillante novelista, un intelectual de fuste que dejó una producción novelística, antropológica y etnológica notable y también desempeñó varios cargos importantes. Fue Conservador General del Folclore del Ministerio de Educación (1947), Jefe de la Sección Folklore y Bellas Artes del Ministerio de Educación (1950-1952), en ese trienio laboró paralelamente como profesor de Etnología en el Instituto Pedagógico Nacional de Varones y entre 1951 y 1952 realizó un viaje de investigación y descubrimiento en el que recogió información sobre el folklore que le proveyó importantes datos para construir el universo ficcional de sus Cuentos mágico- realistas y canciones de fiestas tradicionales del valle del Mantaro, provincias de Jauja y Concepción.
Arguedas, fue Director del Instituto de Estudios Etnológicos, hoy Museo de la Cultura Peruana (1953), paralelamente fue Director de la Revista Folklore Americano que publicaba el Comité Interamericano de Folklore del cual fue Secretario. En 1954, José María Arguedas ganó con su cuento La Muerte de Arango, el Primer Premio del Concurso Latinoamericano de Cuento que organizó México en 1954. Fue también, Director de la Casa de la Cultura (1963-1964) En 1958, viajó a España, realizó en la península diversas investigaciones, sobre todo en las ciudades y pueblos de la provincia de Zamora, allí encontró las raíces españolas de la cultura andina. La información obtenida en estas comunidades fue fundamental para su tesis “Las Comunidades de España y del Perú” con la que se graduó de doctor el 5 de julio de 1963. Arguedas desempeño también el cargo de Director del Museo Nacional de Historia (1964-1966) entre otros importantes cargos.
La narrativa de Arguedas refleja múltiples vivencias, ricas experiencias que son plasmadas en sus cuentos y novelas que señalan a Arguedas como un literato brillante en sus estructuras narratológicas, su lenguaje literario, y en su clima literario.
El escritor de Andahuaylas, dejó una gran huella en la literatura por la originalidad de sus cuentos y por la impecable factura de los mismos: Warma Kukay (1933), Agua (1937), La Agonía de Rasu Ñiti (1962), El Sueño del Pongo (1965) Arguedas nos legó también novelas brillantes que son verdaderos hitos en la historia de la literatura peruana: Yahuar Fiesta (1941|), Diamantes y Pedernales (1954), Los Ríos Profundos (1958), su novela más acabada y brillante, El Sexto (1961), Todas las Sangres (1964), El Zorro de Arriba y el Zorro de abajo (1971) que se publicó después del fallecimiento del gran novelista. La novelística de Arguedas muestra una gran belleza y se caracteriza por una excepcional grandeza literaria.
Arguedas, tuvo que afrontar circunstancias muy duras a lo largo de su vida, estas hirieron su gran sensibilidad y llenaron su alma de grandes sufrimientos que se tradujeron en profundas depresiones. Con el tiempo la depresión del escritor se fue agravando y el escritor no pudiendo soportar más tiempo el cuadro se disparó con un revolver en la sien. La agonía duró cuatro días, el novelista del indigenismo falleció el 2 de diciembre de 1969.
José María Arguedas quien es uno de los grandes exponentes de la novelística del Perú ha dejado a la posteridad novelas y cuentos señalados por un universo narrativo único trabajados siempre con un estilo incomparable. Es un importante promotor y un difusor de la literatura y de la cultura quechua que dio a la Academia valiosos aportes en el campo de la Antropología y del Etnología.
DATO
El doctor Francisco Miro Quesada Cantearías, uno de los más prominentes filósofos del Perú, expresa del escritor de Andahuaylas: “Mi admiración por José María Arguedas no tuvo límites”