Yo soy sus ojos
Roy F. Cárdenas Velarde
Con la pandemia, los deportistas cambiaron su modalidad outdoors por una indoors. Esto les afectó, pero con la reducción del riesgo de contagio, las calles nuevamente fueron tomadas. Pero, ¿ha sido igual para todos los deportistas?
En este universo existe un grupo que llama poderosamente mi atención. Debemos reconocer que para todos es un reto salir de la comodidad de nuestras camas y hacer algún tipo de deporte. Pero existen personas para quienes, por alguna condición, les resulta más difícil. Me refiero a personas con discapacidad visual.
¿Y por qué es más difícil para ellos? Lima ha crecido de manera desordenada, y dentro de ese desorden se obviaron semáforos sonoros y pisos podotáctiles, entre otros más que dificultan el desplazamiento de las personas con discapacidad visual por las vías. Ahora ya puede imaginar por qué señalo que practicar deportes como el running les resulta más difícil.
En ocasiones, debemos pasar por experiencias similares para ser conscientes de la importancia de la inclusión en la sociedad. Y entender que el deporte es parte del desarrollo de la persona, sea que tengan o no algún tipo de discapacidad.
Gracias a las medidas de algunos municipios, los domingos tenemos vías como la avenida Arequipa o las colindantes al Cuartel General del Ejercito (Pentagonito), por las cuales estos atletas pueden practicar el running.
Claro está, ello no podría ser posible sin el apoyo de algunas personas que hacen las veces de guías. Hace unos años llegué a la asociación Yo Soy Sus Ojos (YSSO), donde conocí a personas que, no siendo necesariamente deportistas, se organizaban para guiar a los atletas que les comentaba líneas arriba, sea corriendo, trotando o, sencillamente, caminando.
Este 27 de agosto se llevará a cabo la 114a Media Maratón de Lima & 10k, la más antigua del mundo, donde veremos competir a 23 atletas de YSSO, cuatro atletas de Achilles México y de otros clubes de deportistas con discapacidad visual.
Con la llegada de cada atleta a la meta terminarán su proceso de preparación, y la de sus guías, pero no terminará la carrera de YSSO por lograr un país más inclusivo. Algo que el Estado viene promoviendo. Todos podemos sumar para hacer de esa carrera, como se conoce en el running, un sprint.
Como escuché de Víctor Espinoza, coordinador deportivo de YSSO, en mi primera sesión, no es del todo correcto decir persona invidente o cieguito. Son personas con baja o cero visión, o personas con discapacidad visual.
Y, finalmente, como señalo a mis alumnos: La igualdad es un derecho que se enseña en las aulas, pero que se conquista fuera de ellas, en el día a día.