— Redacción Diario El Pueblo —

Son 27 abuelitos que estaban en completo abandono,   los que  ahora viven en el  asilo San Vicente de Paúl  donde  reciben alimentación, abrigo, cuidados de su salud y  apoyo espiritual gracias al programa “Solidaridad en marcha”.

Por Roxana Ortiz A.

Desde  hace  20 años aproximadamente, el Arzobispado de Arequipa les  solicitó que se hagan cargo del asilo asumiendo desde ese entonces, el reto de   asistir  a  abuelitos  que se encontraban en la calle en completo estado de abandono, viviendo de las  limosnas o en medio de los basurales. Ahora  viven con dignidad, tienen  calidad de  vida,  indicó  el hermano Víctor Ramos Herrera, coordinador de Solidaridad.

Todo lo que han logrado hacer por estas  personas de la tercera edad y en estado vulnerable, lo consiguen gracias a donaciones  de empresas y organizaciones  sin fines de  lucro. En  tiempo de la pandemia de la COVID, se vio la  necesidad de  tener mejores servicios  higiénicos  para poder  cuidar su salud  y evitar los contagios. Tenían un solo  baño para los abuelitos  y 6 cuidadores.

Organizaron la campaña “Una casa bonita para mi abuelita” y a través de las redes sociales pidieron la  ayuda para  poder  construir una batería de  baños adecuada y una  lavandería  y así es que los pusieron en contacto  con la Embajada de Alemania  en Perú, que se interesó en el asilo  y colaboró con parte del presupuesto para lograr el objetivo, que fue de 240 mil soles. También se recibió  ayuda de la embajada de Italia y de cementos  Yura  con parte de los materiales.

El reto ahora  es  buscar el apoyo  para  ampliarles  un comedor y la  cocina, además de  habilitar unos cuantos cuartos más y poder brindar  apoyo a otras personas que lo requieran. Tenemos capacidad para recibir hasta 40 abuelitos, pero no hay el suficiente espacio para darles  un servicio con dignidad, quizá más adelante, dijo Víctor Ramos.         

Para la  inauguración de los nuevos ambientes, llegó el embajador de Alemania, Stefan Herzberg, quien  señaló que  gustosamente colaboraron  con la obra. Indicó que  lamentablemente por la guerra en Rusia  y Ucrania, todos los  fondos se están destinando para asistir a más de  300 mil ucranianos que  han llegado como refugiados a su país.

Señaló que este tipo de apoyo que se ha brindado a los más necesitados del país, es lo mejor que se llevará de  recuerdo  cuando retorne a Alemania  en el mes de junio, luego de haber cumplido su misión durante  cuatro años en el país.

SOLIDARIDAD EN MARCHA

Solidaridad en Marcha, es una  asociación sin fines de  lucro  conformada por laicos y también integrantes del Movimiento de Vida  Cristiana, preocupados por los más pobres. Tienen a su cargo un asilo para ancianos abandonados: el colegio San Juan Apóstol, el Colegio Nuestra Señora de la Solidaridad, en Paucarpata y en Cerro Colorado, dirigido a más de  mil 100  escolares de escasos recursos, en donde los que tienen algo de ingresos aportan con lo que pueden. En convenio con el Estado  y a través del programa Cunamás tienen  tres guarderías, entre otros.

El Estado aporta  con los docentes para los planteles, mientras que ellos se encargan de  conseguir a  través de donaciones, el mobiliario para las  aulas, para los salones de psicomotricidad, los juegos, entre otros que son necesarios  para  brindar  un buen servicio.