Presidenta Boluarte envió mensaje de paz, unidad y optimismo
En víspera de la Navidad, la presidenta de la República, Dina Boluarte, envió un mensaje de paz, unión y optimismo para seguir construyendo una nueva historia en nuestro país.
«Deseo que llegada de Niño Jesús llene de paz, unidad y optimismo los hogares de cada de uno de nosotros. Es una fecha para reflexionar en la fe, a ese Niño Divino que nos dice que hay un niño que nace cada día en nuestros corazones», señaló.
La jefa de Estado dijo que el 2023 no fue fácil, por lo cual expresó su deseo de que el próximo año los peruanos y peruanas caminemos juntos como familia construyendo una nueva historia.
«Pero este 24 de diciembre, quiero decirle a cada uno de los hogares en el norte, en el centro, en el sur, en la selva, en la sierra y en la costa que la Sagrada Familia de María, José, del Niño Jesús, permanezca siempre en nuestros hogares», indicó.
Afirmó que durante el 2024, el Gobierno realizará todo el esfuerzo para buscar el bienestar de los más de 33 millones de peruanas y peruanos.
La mandataria destacó que los peruanos somos una sola familia y como tal debemos avanzar juntos para cumplir las metas trazadas.
«En esta Navidad que se renueve el amor, la calma, paz y ese punche para seguir desarrollándonos como seres humanos, como familia, como peruanos. Feliz Navidad a cada uno de ustedes, los quiero con todo mi corazón», concluyó.
MENSAJE DE ARZOBISPO
El arzobispo de Arequipa, Javier del Río Alba, días atrás envió un mensaje recordando el significado de la Navidad y el nacimiento del Niño Jesús. La autoridad eclesiástica señaló que frecuentemente los seres humanos olvidamos que el amor y la paz no debe provenir de lo exterior mucho menos solo cumplir un a tradición al desear la paz a otra persona.
«Quisiera invitarlos a no dejar pasar esta oportunidad de experimentar lo que realmente significa y puede hacer en nosotros la Navidad. No quiero decir que debamos abstenernos de las múltiples ocupaciones de fin de año ni de comprar los regalos que estén al alcance de nuestras posibilidades; pero debemos evitar que todo eso nos lleve a olvidar que la Navidad es la fiesta de la venida de Dios al mundo. Dios que viene a hacer fiesta con nosotros», escribió.
Asimismo señalo que en la Navidad Dios se hace pequeño y frágil y se nos es entregado, donado. Asumiendo la naturaleza humana para hacernos partícipes de su naturaleza divina.
«Dios viene al mundo para detener la cadena del mal que comenzó en el Paraíso, cuando la serpiente engañó a nuestros primeros padres, y que desde entonces no ha dejado de extenderse porque satanás sigue engañando al género humano de generación en generación. Caer en ese engaño, aunque sea de modo inconsciente, es la razón por la que muchas veces no nos sentimos bien con nosotros mismos, no nos sentimos en paz, porque el pecado nos divide de Dios y, por tanto, de la única fuente de la verdadera paz y del único amor capaz de satisfacernos plenamente», nos dice.
Finalmente nos exhorta a que no olvidemos de que prepararnos para la Navidad no debe excluir la toma de conciencia de que el centro de nuestra celebración es el nacimiento de Dios que se hace hombre para cargar con nuestros pecados y darnos, a cambio, la vida eterna.