ENTREVISTA: Sacerdote Franz Windischhofer

“Debemos ver más lo que nos une y menos lo que nos divide”

“Necesitamos escucharnos más, tomarnos el tiempo el uno por el otro y de nuevo formar un poquito el corazón”, nos dice el padre austriaco, de la parroquia Callalli, en Caylloma. 

Por Dany La Torre

La violencia es un “villano” del que pocos escapan y el sacerdote Franz Windischhofer lo sabe muy bien. Es austríaco de nacimiento, pero hoy se siente más peruano que nunca. Lleva en el país más de 40 años, los primeros 10 los vivió lleno de momentos gratos y duras lecciones en medio del conflicto armado interno durante la década de los ochenta y noventa cuando era párroco de Huántar, provincia de Huari. “Por el terrorismo tuve que salir también, por esa razón he venido a Callalli, la parte alta del Colca, allí estoy trabajando casi 32 años en esas parroquias, en esas alturas”, explica.

Debido a su importante labor para contribuir a una cultura de paz durante una de las épocas más violentas del país, fue galardonado con el “Premio por Paz 2012” por el Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables en reconocimiento por su trabajo y compromiso. Hoy nos cuenta que su trabajo, como el de muchos misioneros de la fe cristiana, no ha culminado. La violencia se tiñe de rojo en Ucrania. Los estragos de la guerra buscan fulminar el mensaje bíblico de la paz.

¿Qué lo motivo visitar al Perú?

De joven tuve muchos intereses, ese fue mi problema, todo me encanta y me gusta, yo quería ser médico, arquitecto, militar, sacerdote, de todo y al final me metí al seminario y me quedé ahí con la idea de ser misionero, por la idea de un padre que siempre me apoyo. Yo quería ser como él, misionero en África, no llegué allí, pero si al Perú, me quedé como misionero y lo más hermoso es que si en mi vida he tenido siempre este sueño de joven de realizar tantas cosas, aquí tuve la oportunidad hacerlo, hablo sobre todo desde el periodo de la década de los 80 hubo mucha necesidad y pobreza y mediante eso quisimos construir farmacias, hemos construido puentes escuelas, casas comunales, capillas y he podido realizar mis sueños de joven.

-Pero aquí también descubrió  la violencia y la hambruna

Eso es verdad, pero tengo que decir que mi niñez tampoco ha sido fácil, he vivido de cerca la pobreza en mi propia carne y hemos pasado momentos difíciles y gracias a Dios esto me ha motivado para apoyar ahí donde hay necesidad. He tratado de servir y ayudar en lo que yo he podido y sobre todo siempre he invocado a la paz, esto en el tiempo del terrorismo, siempre he visto que la violencia no es la solución. Llamar a la paz, la tolerancia y sobre todo al diálogo, eso he intentado, en eso nos han atacado también. Recuerdo que pasé por lo que se podría decir un juicio popular y gracias a Dios yo he sobrevivido ese juicio popular y me han dicho bueno no te matamos, pero te vas. Más bien al señor alcalde, al exalcalde lo fusilaron a mi lado, es una experiencia muy triste, por eso yo digo que tenemos que hacer todo lo posible para vivir en paz, eso es lo más bonito.

Recibió el “Premio por la Paz 2012” en el Perú

Estoy muy agradecido que aquí en el Perú se haya reconocido este trabajo en favor de la paz.

Ahora existen nuevos conflictos bélicos, como el que se desató en Rusia y Ucrania?

Es muy difícil de entender, yo como europeo, en el continente de dónde vengo nos consideramos muy civilizados, eso es lo triste, justo ahí en estos países civilizados surgió este conflicto y es muy difícil de entender, pero lo que hay detrás de esto es el interés del poder, qué un solo señor se impone a los demás y eso es lo triste. Eso hace ver la importancia de esta educación para la paz y sobre todo de los valores cristianos para que busquemos más el diálogo y sepamos entendernos y respetarnos, aunque el otro sea distinto y tenga otras opiniones El Perú me ha ayudado en eso porque aquí, con esta diversidad de gente, de las culturas y de las razas; aquí todos viven tranquilos y juntos, eso me ha fascinado siempre aquí en el Perú y por eso seguro me he quedado, eso he aprendido acá, eso deberíamos ver mucho más, ver más lo que nos une, no lo que nos divide y más tolerarnos y respetar a cada uno en su diversidad y no imponerse el poder.

¿Qué ha pasado con los líderes mundiales?

Yo creo que es la ambición por el poder, es una tentación muy antigua desde siempre y que no entendemos bien que la autoridad que uno tiene es para servir y Jesús lo dice también en Marcos 10:10 dice, entre ustedes no debe ser así, sino que el que es grande, debe ser el servidor del otro. Ese es el problema, porque vemos que no solamente se trata de dinero, sino el que tiene tanto dinero debe dejar esa ambición por el poder.

Está crisis parece no tener una solución

No sé qué pasará en lo próximo, pero hay que ver que justo el papa está consagrando a Ucrania y Rusia a la virgen, a la reina de la paz, yo creo que el fin es que eso, es lo que debemos hacer más, orar o rezar y dejar todo eso en manos de Dios, no debemos desesperamos y pensar lo peor, sino que la esperanza nos ayude a esperar. Para que ojalá y se den cuenta que hay todavía hay una solución.

¿En la guerra hay ganadores o perdedores?

Todos pierden, hay que ver la desgracia son tantos niños que se ha matado, las señoras pobres y que están escapándose con sus hijos, también Austria, pero hay también algo nuevamente muy hermoso que sucede, y es que me gusta mucho la solidaridad de la gente y algunas personas se van a la estación del tren y los reciben con una bebida caliente, con café, con té, con su sándwich también para que sigan en su viaje, hay ver eso también, no todo está perdido, lo último es la esperanza que me mantiene vivo también

¿Los  gobiernos están obrando bien para frenar esta guerra?

Ellos actúan con bastante cautela, pero yo no sé, se puede decir que no estoy tan al tanto de todas estas noticias. El Papa sobre todo está tratando de interceder para que haya está paz, yo creo que están actuando con mucha cautela y eso tenemos que cuidar, porque no sé qué quiere que pase una tercera guerra mundial. En el Vaticano están en una conversación también, inclusive había la idea de encontrarse con patriarca de Moscú, Kirill (jefe de la iglesia ortodoxa rusa) Si bien no sabemos con exactitud qué están haciendo, vemos que hay los esfuerzos para el diálogo, también hay esta actividad de orar y consagrar a los dos países de Rusia y Ucrania para que haya paz, esperamos que esto tenga sus resultados.

¿Qué le falta a la humanidad?, ¿por qué no hay paz?

Se ha avanzado en parte, porque cuando vemos en la historia del mundo siempre hubo estos conflictos, pero ahora con los medios de comunicación sabemos en seguida, si en el último rincón del mundo hay un problema, sabemos ahí mismo que sucede, pero sí creo que hemos ido perdiendo estos valores, cada vez más entra la ambición del dinero, y del poder también, no vivir así también hay la falta de solidaridad, también el individualismo y egoísmo. Pero yo creo que debemos descubrir lo esencial y lo importante que son los valores de la tolerancia, de respetarnos y la gratitud también.

¿Se han perdido las enseñanzas bíblicas?

Exactamente, en Juan 4:34 nos dice “mi comida y mi alimento es hacia la voluntad del que me envió a hacer su obra”, este es hacer su camino que lleva a Dios, este camino que lleva a la paz, nuestra unión en esta armonía que yo lo veo representado en Chavín, el hombre equilibrado, el hombre centrado, el hombre que está bien con Dios y consigo mismo, con los demás y con el medio ambiente todo esto es por último y es lo que vemos en las culturas de acá. Pero parece que nos salimos nuevamente del camino.

¿Qué necesita la humanidad para tener un periodo de paz?

Yo creo que debemos empezar un poco más abajo, como digo siempre, debemos cuidarnos del virus “NHT” (No hay tiempo), no solamente del coronavirus, ese el problema, la gente ya no tiene tiempo para escucharse, para hablarse contarse las cuentas, para educarse también, porque todos estamos metidos en tantas cosas y eso es lo que necesitamos también, necesitamos escucharnos más, tomarnos el tiempo el uno por el otro y de nuevo formar un poquito  el corazón y desde ahí dar el ejemplo vivir nuestra fe y creencias.

DATO

El hombre mismo es el enemigo de la unidad cuándo se empieza a correr y cierra su corazón, miremos el caso del cóndor y el colibrí. La primera puede ver a Viracocha porque tiene el corazón limpio, solo se alimenta de lo esencial y, el segundo se alimenta del néctar de las flores y  ¿de qué nos alimentamos nosotros?, “de mucha basura, comida chatarra o mucho del internet, de cualquier cosa”. Tenemos que cuidar de que nos alimentamos, por eso como Jesús dice: “mi alimento es hacer la voluntad del que me envió”.

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