La reivindicación del Congreso
Por: Carlos Meneses
“El Congreso está llamado a jugar un papel importante en el dramático momento que se vive y en poner término a la preocupación que todos tenemos y que significa un desinfle de la popularidad que llevó al poder al señor Castillo”.
Está cercana una hora clave para que el Congreso de la República reivindique su alicaído prestigio que, según todas las encuestas de opinión pública revelan, está por debajo del 10 por ciento.
Deberá decidir el parlamento en forma que no deje duda alguna con respecto a la prudencia exigida a los legisladores sobre un proyecto de ley cuya constitucionalidad es discutida por especialistas.
Esto podría ser definido, probablemente, por el Tribunal Constitucional (TC). El artículo 206 de la Constitución vigente señala que el anunciado propósito del Poder Ejecutivo de utilizar el proceso electoral de octubre próximo para realizar una consulta ciudadana respecto a si conviene o no a los intereses nacionales un cambio de la Constitución y también concretar si el anunciado propósito del régimen del presidente Castillo está dentro de lo permitido por la Constitución actual que señala un trámite de decisión que empieza en la Comisión de Constitución del parlamento y culmina en el pleno del mismo.
María del Carmen Alva, actual máxima figura del Congreso, ha dicho que procederán de acuerdo con los mandatos constitucionales vigentes. Asimismo, recomendó como medida más prudente y adecuada tratar los temas que preocupan actualmente en materia de precios de combustibles y alimentos.
Lo importante es devolver a la ciudadanía las condiciones de vida indispensables para garantizar la continuación del estado de derecho y como, reiteradamente, lo hemos sostenido dejar de utilizar la amenaza de un golpe de Estado que ponga en riesgo el estado democrático, en que hemos vivido, y el sistema económico que nos permita recuperar el tiempo perdido en discusiones improductivas para la inversión y el empleo.