Por: Roxana Ortiz A.

“El primer cambio que se debe dar para salir de la crisis es el Gobierno. Deben tomar conciencia que han sido elegidos para gobernar por el bien del país; los ministros no tienen la experiencia necesaria y lamentablemente tampoco se dejan ayudar por quienes tienen esa capacidad”, indicó monseñor Javier del Río Alba, Arzobispo de Arequipa.

El Presidente debe recapacitar ante lo que está ocurriendo, no seguir con los ojos cerrados, los ciudadanos le dieron la confianza para gobernar por el bien de todos y por eso es importante una reflexión, porque su éxito será el de todos los peruanos, agregó.

Considera que no hubo las personas adecuadas para prever las consecuencias de la crisis generada por el tema de la pandemia, la caída de la economía, la pérdida de miles de puestos de trabajo, sumado a la crisis mundial por el conflicto entre Rusia y Ucrania; pero todo eso se pudo haber previsto, como lo han hecho en otros países.

“No soy quién para decir qué es lo que se debe hacer, pero es importante generar el diálogo, ponerse de acuerdo con el Congreso, buscar a los más expertos, de lo contrario la crisis se agravará y como ha pasado en otros países, la población se ha levantado y ha logrado la salida del presidente, lo cual no se quiere”, añadió el Prelado.

DEGRADACION DE LA MUJER

Por otro lado, el Arzobispo de Arequipa lamento las autoridades hayan autorizado el funcionamiento de un prostíbulo en Cerro Colorado, porque con eso se está legitimando el maltrato a la mujer, la forma más horrible de la degradación para el ser humano, hombre o mujer, pagarle a alguien para usufructuar de su cuerpo.

“En muchos países la protitución está penado, pero no tanto para quien ejerce la prostituión, sino por quien pagar por usar el cuerpo de una mujer, que muchas veces practica el oficio por necesidad, porque no tiene dinero para alimentar a sus hijos, porque en algún momento la abandonaron y tiene que seguir subsistiendo, Hay que ponerse en los zapatos de esas mujeres, tener que ser usada una y otra vez por los hombres, algunas veces borrachos, drogadictos, que las maltratan; la situación no es tan fácil ni simple para ellas.

SAN PEDRO Y SAN PABLO

Las declaraciones la ofreció Monseñor Javier del Río Alba, luego de la celebración de una de las festividades más importantes para los católicos, como es el día de los apóstoles San Pedro y San Pablo, además del día del Papa, elegido por Dios para guiar a la iglesia y cumplir mejor la misión de evangelizar y la promoción humana integral.

Esta celebración se realizó en la Basílica Catedral con la presencia de muy pocas autoridades, a diferencia de hace tres años, en que se volvió a las actividades presenciales.