Por: Dany La Torre

La percepción de inseguridad ciudadana viene aumentando en Arequipa y cada vez son más los actos de violencia que no son denunciados ante la Policía Nacional, así lo dio a conocer el gerente de seguridad ciudadana de la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA), Diego Chirinos. Este informó que el personal de serenazgo de la comuna realiza anualmente más de 45 mil 900 intervenciones.

“Las intervenciones aumentan más debido al mismo ambiente de una abierta actitud de muchos ciudadanos arequipeños que concurren en horas de la noche a ambientes nocturnos o fiestas y terminan en situaciones que los ponen en riesgo o vulnerabilidad su misma vida o integridad física, hay un incremento en la ingesta de alcohol y de algunas sustancias tóxicas y la existencia de locales que venden esto”, explicó.

La mayor parte de estos casos son reincidentes en zonas aledañas a la ribera del río Chili, donde los consumidores habituales de alcohol y drogas que permanecen en ese lugar, llegan a atacar a los transeúntes con la finalidad de reunir dinero para consumir más sustancias nocivas. Otros puntos de peligro se concentran en las calles Víctor Lira y 2 de Mayo.

“En Arequipa son alrededor de 350 consumidores habituales que están en la vía pública y el problema es que no hay donde llevarlos (…) Tenemos un grupo de personas que terminan en la vía pública con mucha mayor incidencia los fines de semana (…) arrebatan celulares o bicicletas y exigen dinero y piden apoyo y si no les dan amenazan” añadió.

En ese sentido, Chirinos consideró que el mapa del delito debe considerarse desde dos aristas. La primera está referida a las denuncias efectuadas ante las diferentes dependencias policiales que incluso terminan con carpetas fiscales. En tanto, refirió que el otro aspecto por considerar está en los hechos de violencia que no son denunciados y son cada vez más habituales en Arequipa.

“Hay muchos que están referidos a delitos contra la moral y las buenas costumbres, el consumo excesivo del alcohol o ruedos molestos, la prostitución, el pandillaje y el hecho de alterar el orden público, riñas y grescas que no terminan en denuncias a la policía”, explicó.

El funcionario consideró que, debido a la falta de flagrancia delictiva, muchos de estas personas intervenidas y trasladadas a alguna comisaría terminan libres. Destacó que incluso llegan a denunciar abuso de autoridad de los serenos. Ante este panorama, Chirinos señaló que la percepción de inseguridad viene en aumento.

Del mismo modo, comparó las últimas cifras que detalló la Policía Nacional en Arequipa donde se reportaron 15 mil denuncias, mientras que, en caso a las intervenciones de serenazgo, se contabilizan más de 45 mil 900 intervenciones por año. “Todas ellas fueron con demanda de la población”, agregó.