Por: Roxana Ortiz A.

El primer día de paralización de los transportistas de carga pesada se llevó a cabo de manera pacífica y con un arduo control por parte de las autoridades políticas, como el Prefecto y los subprefectos, además de los efectivos de la policía nacional que se habían desplegado por diversos sectores.

PNP impidió bloqueo de vías

No fue sino hasta promediar el mediodía, que una marcha rodante dio inicio a las actividades de los transportistas, quienes se reunieron en la variante de Uchumayo para partir luego hacia el kilómetros 48, que demoró el tránsito de quienes se movilizaban por la Panamericana.

En Uchumayo, a cada unidad privada, los protestantes comenzaron a pintar las lunas de apoyo al paro, pero el hecho demoraba el tránsito, por lo que los efectivos policiales que estaban en el lugar, prohibieron el hecho.

Hasta el kilómetro 48 se dirigió el prefecto Yeremi Torres, quien nuevamente advirtió a los transportistas de las penalidades a las que se enfrentan si es que bloquean las carreteras o impiden el paso de los demás vehículos que no forman parte de la protesta. Indicó que si es que por ejemplo, se deja un vehículo abandonado en la pista, se hará el reconocimiento del propietario a través de Registros Públicos y se procederá al levantamiento del acta, que será derivada tanto al Ministerio del Interior como al Ministerio Público para las respectivas denuncias.

“Pueden protestar como deseen sin alterar el orden público y sin perjudicar a los demás ciudadanos, de lo contrario tendrán que asumir las consecuencias como lo estipula el código penal; además está vigente la declaratoria de emergencia de todas las vías del país y los decretos de urgencia emanados por el Gobierno central, por lo que la policía nacional está en plenas facultades para actuar en cualquier momento”, añadió el Prefecto regional.

Indicó que en ningún momento se ha cortado el diálogo con los transportistas y dijo que la comisión de alto nivel que se encuentra en el local de la Prefectura los ha estado esperando para continuar trabajando y asegura que el 80% de los pedidos de los transportistas se han resuelto, caso contrario a lo que aseguran los hombres del volante.

SIGUE LA HUELGA

Los transportistas de carga pesada han sido objeto de un control estricto, por lo que el paso de los vehículos por la carretera se llevó a cabo de manera normal y aunque aseguraron que siempre llevaron a cabo un paro sin afectar a los demás, esto no ocurrió así, porque por ejemplo, no se permitía el paso de los buses con pasajeros.

Javier Corrales, dirigente de la Asociación de Transporte Pesado indicó que estarán ideando nuevas estrategias de protesta y que las advertencias hechas por las autoridades no les generan temor, porque no están cometiendo actos ilegales. Sin embargo indicó que no han estado actuando de manera legal y están tratando de enfrentarlos con la población, al asegurar que se ha cumplido con la mayor parte de sus requerimientos, cuando eso no es cierto.

Agregó que hasta que no llegue una comisión de Lima, integrada por los ministros de Transportes, Energía y Minas, del ministerio de Economía y Finanzas y del Interior para ver el tema de la delincuencia en carreteras y hasta el mismo presidente Pedro Castillo, no depondrán las medidas de fuerza, porque dijeron sentirse burlados.

Ratificó que con las medidas planteadas como alternativa, lo único que buscan es favorecer a los grandes monopolios y empresas, mientras que los pequeños empresarios solo son utilizados.

PASAJE

Ayer la venta de pasajes de servicio interprovincial en los terminales terrestres era normal, luego de las 9 de la mañana se interrumpió la venta para ciudades como Juliaca, Puno o Cusco, debido a que allí sí se había bloqueado la carretera. Mientras tanto, el transporte informal, aprovechando la incertidumbre de los pasajeros, trataron de beneficiarse de las circunstancias y por ejemplo, un pasaje que normalmente cuesta 15 soles a Mollendo, lo vendían en 35 soles.