Por: Carlos Meneses

“Esta es la realidad y es bueno tenerla en cuenta para que otra vez todos llevemos la mano al pecho para repetir, como en el confesionario por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa”.

Las encuestas electorales siempre son motivos de polémicas y de cuestionamientos, pero las que se están realizando, hasta ahora, en Arequipa evidencian que concretamente la mayoría de los electores no tiene el voto decidido y lo que es peor están pensando, en mayoría, votar en blanco o viciar la constancia de su sufragio.

La confusión muestra que la campaña no ha logrado despertar interés en los convocados o que los postulantes a la gobernación regional o a la alcaldía provincial no han hecho el esfuerzo necesario y suficiente para convencer y atraer votos.

El riesgo es repetir la experiencia de otras veces, en las que quien resulte ganador sea el que parezca ser el mal menor y que en la primera vuelta la votación no sea reflejo real de la incomodidad del elector por no tener lo necesario para bien decidir.

Tanto en la encuesta de Datum como en la recién realizada por Ama Kella de Radio Yaraví, más del 50 % de los electores no han decidido por quién votar y cifras muy bajas son las que obtienen los que aparecen como favoritos y que están por debajo del 9%.

Así podemos repetir la historia de los 4 años anteriores. La situación no es distinta en las otras provincias de la región y en muchos de los distritos de la provincia de Arequipa.

Es probable que hayan faltado debates o que no se han realizado las exposiciones adecuadas en cada uno de los lugares donde los candidatos están luchando votos. Es, también, verdad que los problemas que confronta el ciudadano común y corriente no le dan chance a detenerse en otros temas que no sean subsistencia y situación económica o empleo.