Guerra sucia caracteriza a los últimos días de campaña electoral
Por: Roxana Ortiz A.
La gran cantidad de dinero que probablemente se haya invertido en esta campaña electoral y el hecho de observar que no levantan en las encuestas, está haciendo que algunos candidatos se olviden del pacto ético que firmaron y han desatado una campaña brutal de desacreditación de sus contendores, especialmente contra aquellos que supuestamente tienen las preferencias del electorado.
Aunque en anterior oportunidad ya se habían denunciado enfrentamientos y ataques por buscar la mejor pared para colocar las pintas, estas se han incrementado en los últimos días. Por ejemplo se ha denunciado el ataque con pintura en locales electorales en Mariano Melgar.
Se trata del local de campaña de Sergio Gonzales, quien a pesar que fue retirado de la recta electoral sigue impulsando su lista a la municipalidad distrital de Mariano Melgar; lo mismo ocurrió con el candidato Carlos Andrade.
Ambos locales, en horas de la madrugada terminaron con sus fachadas pintarrajeadas con colores rojo y blanco, a pesar de estar ubicados muy cerca a la plaza de Umachiri, y cerca a la comisaría policial. Están tratando de recuperar los videos de la cámara de vigilancia para determinar quiénes han sido los culpables de este hecho.
En Cerro Colorado, un grupo de simpatizantes del movimiento Unidos por el gran cambio, denunciaron haber estado por la Vía 54 colocando material electoral en los muros cuando se cruzaron con un grupo de simpatizantes de Juntos por el Desarrollo de Arequipa. Al principio solo fueron agresiones verbales pero después les arrojaron una piedra que reventó la luna del vehículo.
Pero la guerra sucia más brutal, se realiza a través de las redes sociales, donde se están difundiendo una serie de supuestas irregularidades y actos delincuenciales que dicen haber cometido los candidatos que están ocupando los tres primeros lugares y que postulan al Gobierno Regional de Arequipa.
Es el caso de Rohel Sánchez, ex rector de la Universidad Nacional de San Agustín, del movimiento Yo Arequipa, de quien señalan recibe dinero de las mineras, de la propia universidad, ligado a personas que están prófugas de la justicia. Javier Ísmodes no se salva de esta dura campaña, además de tildarlo de chileno, se mencionan una serie de hechos irregulares que habría cometido como empresario.
Incluso Héctor Herrera ha sido el blanco de algunas publicaciones injuriosas, relacionadas con su accionar en defensa de algunos dirigentes del valle de Tambo.
La homofobia y discriminación no se hizo esperar y fue más evidente en contra de Paloma Cayana Condori, una persona transgénero que ha decidido postular al Consejo Regional y que ha sido el blanco de una serie de insultos del más grueso calibre.
Ella señala que ese tipo de comportamiento de la gente lo ha recibido en mucho tiempo, pero que esta vez ha sido masivo, desde que no aceptan que se trata de una persona “trans”, vestida de mujer, a la cual le piden presentarse como un “hombre”, que es el menor de los insultos.