Falleció persona que tenía viruela del mono en Arequipa
Por: Roxana Ortiz A.
Una persona que había contraído la viruela del mono falleció en el hospital Honorio Delgado, luego de permanecer varios días hospitalizado. El fue trasladado desde Camaná con su salud bastante desmejorada, debido a que también era portador del VIH.
Esta enfermedad prevalente hizo que se agravara con el contagio de la viruela que hizo que se produjera una hemorragia intestinal, además de una infección y fue imposible salvarle la vida, indicó el jefe de Epidemiología de la Gerencia de Salud, Percy Miranda.
Dijo que al igual que sucedió en la ciudad de Lima, el paciente no falleció precisamente como consecuencia del contagio de la viruela del mono, sino por la complicación que se diera en el organismo al tener el Síndrome de Inmuno Deficiencia Adquirida.
Señaló que actualmente tienen otros dos pacientes que se encuentran hospitalizados con la viruela del mono, pero que no tienen complicaciones de su salud. A ellos se les está haciendo un seguimiento continuo para conocer además el proceso de la enfermedad, ya que por tratarse de algo nuevo, no hay historial médico al respecto.
Lo que sí ha quedado claro es que hay mayor incidencia entre los contagiados, en personas que tienen relaciones sexuales entre personas del mismo sexo o aquellas promiscuas, es decir que solo tienen parejas ocasionales, por lo que se recomendó tener cuidado al respecto para evitar la propagación de la enfermedad o que en todo caso, complicaciones con la misma.
“Cuando la persona tiene enfermedades como el SIDA o tuberculosis, de por sí el cuerpo se encuentra debilitado, no tiene refuerzos para afrontar otra enfermedad, por lo que cualquier virus o bacteria puede agravar su situación. Ocurrió lo mismo con la COVID, que dejó serias secuelas en el organismo a personas que arrastraban otra enfermedad y finalmente les ocasionó la muerte”, agregó el especialista.
Por ello recomendó a los ciudadanos mantener un estricto cuidado con la limpieza en caso de convivir con personas que tenga el mal, separar los utensilios que utiliza, usar en todo momento la mascarilla para evitar los contagios a través de la saliva, ventilar los ambientes y sobre todo evitar contacto directo con ellas, ya que una vez que las ampollas o pápulas que le salen en la piel se revientan, son altamente contagiosas.
El problema está en que la mayoría de contagiados, por ser personas que mantienen relaciones sexuales con parejas ocasionales o son homosexuales, difícilmente dan a conocer quiénes forman parte de su círculo más cercano como para hacerles un seguimiento y determinar si es que se han registrado contagios, señaló el médico.