Por: José Colque

Por su ubicación en el hemisferio sur, la región de Arequipa es uno de los lugares a priorizar para una futura implementación del Observatorio de rayos gamma, un proyecto tecnológico y astronómico que permitirá observar al centro de la galaxia donde se encuentra un agujero negro supermasivo denominado Sagittarius A*, con una masa equivalente a 4 millones la masa del sol, que ejerce una gran fuerza gravitatoria responsable de mantener a toda nuestra galaxia unida.

El proyecto ya fue planteado, pero se necesitan alianzas interinstitucionales para su implementación. “Hay necesidad de disponer de energía, acceso de agua potable, infraestructura básica para monitorear, hacer la toma de datos, experimentación y se puede hacer con financiamiento en el que puedan participar el Gobierno Regional, los municipales y el Gobierno Central, pero el gran tema es la consolidación de una red de colaboración que implica a las regiones donde se va hacer las instalaciones”, precisó el presidente del Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (CONCYTEC), Benjamín Marticorena Castillo.

El lugar elegido en la región sería Yanque, en Caylloma. Otras propuestas involucran a la Laguna de Sivinacocha en Cusco, el sector de Tarata en Tacna e Imata. Marticorena señaló que como principal instalación contarían a Arequipa, por lo que esperan que la Universidad Nacional de San Agustín (UNSA) comande una red de instancias universitarias y gubernamentales. “El mecanismo central es hacer de la región sur, una donde se investiga con categoría mundial”, acotó. Es preciso indicar que además del Perú, existen opciones como Chile, Argentina y Bolivia, pero el país parte con ventaja por su latitud y altitud en el sur.

La implementación del proyecto tendría raíz en otro que ya fue realizado. Se trata del Observatorio de rayos gamma ubicado México. Fue construido por una comunidad científica internacional (EEUU, Europa, México etc.) y está a una altura de 4100 m en el Hemisferio Norte. Su composición data de un conjunto de tanques de agua implementados con sensores de luz y detectan las partículas que fueron creadas cuando los rayos gamma, provenientes de fuera de la Tierra e interactúan con nuestra atmósfera.