Roxana Ortiz A.

Mientras  un gran grupo de jóvenes  preparan el disfraz para salir a divertirse y consumir gran cantidad de  bebidas  alcohólicas en las calles y locales de la ciudad arriesgando su salud y sus vidas por las celebraciones de Halloween,  otro grupo alista las provisiones, carpas, ropa de abrigo y las ganas  para  pasar un par de días  diferente a una  hora y media de la  ciudad, en medio del  desierto.   

Se trata de la X Fiesta Juvenil de la Fe, que se realiza en el Santuario de la Virgen de Chapi y que  este año tendrá como invitados especiales al consagrado grupo “Alfareros” de República Dominicana. Miles de jóvenes llegarán hasta el complejo ubicado en el distrito de Polobaya, después de dos años en los que debido a la pandemia de la COVID-19, no pudieron reunirse para vivir una noche diferente, de gozo evangélico y alegría pascual bajo la maternal protección de la  “Mamita de Chapi”.

Como todos los años, los jóvenes comenzarán a llegar al Santuario el 31 de octubre a partir de las 6 de la tarde. Tendrán momentos de oración y de esparcimiento. Luego se realizará el concierto musical a cargo de Alfareros, quienes el año 2018 ganaron el Latin Grammy al mejor álbum cristiano en español con su producción “70 veces 7”, y que ya estuvo en la Arquidiócesis como invitado especial para la VII Fiesta Juvenil de la Fe.

Además, estará presente el Ministerio de Música de la Arquidiócesis que pondrá a cantar y bailar a los jóvenes con una serenata festiva a la Virgen. También habrá sacerdotes para confesar a los jóvenes que lo deseen y después de descansar, la fiesta continuará y culminará con la Misa Solemne en el nuevo templo el uno  de noviembre, de modo que a las doce del día se pueda emprender el camino de regreso a casa.

La participación es gratuita y está abierta para todos los jóvenes católicos, pero también jóvenes de otras comunidades cristianas e incluso aquellos que por distintos motivos han dejado de participar en la vida de la Iglesia y quienes no participan en ninguna religión pero que, atraídos por sus amigos o por la curiosidad, se trasladen hasta Chapi para ver por qué esta fiesta congrega a tantos de sus coetáneos.

“Este año la Mamita de Chapi nos espera a todos con mucho cariño. No se olviden de llevar ropa de abrigo, porque en la noche hace frío, una carpa donde dormir algunas horas, algo de comer, ropa ligera, un gorro y bloqueador para el sol de la mañana siguiente. ¡Los espero!”, manifestó Mons. Del Río, animando a los jóvenes a volver a experimentar la alegría del encuentro con Dios y ponerse en camino a la Jornada Mundial de la Juventud del próximo año que se realizará en Lisboa.