Por: Willard Díaz

LIBROS

En nuestro país dedicarse al arte contemporáneo parece todavía una elección incorrecta, fuera de lugar o de momento. Lejos de los mercados especuladores y de las subastas millonarias, los artistas plásticos cuyas obras luchan por inscribirse en el espíritu crítico del contemporáneo radical son vistos como ilusos excéntricos sino insanos. El arte contemporáneo (no el moderno que ya asimiló a la industria cultural o que funge de independiente con dineros del Estado) hizo de la crítica al comercio de las personalidades y los deseos su bandera y razón de ser.

Juan Javier Salazar, uno de los primeros y los mejores en abanderar esa crítica en nuestro país, recibe, por eso, un merecido estudio por parte de Mitrovich, que se publica como debe ser, como solo podría ser, en una edición no venal, casi rústica, que sin embargo ilustra la seriedad y el rigor científico de los mejores tratados sobre arte contemporáneo internacional que se haya leído. No es difícil por eso, considerarlo uno de los mejores libros leídos en este año.

A partir del análisis de una obra emblemática de Salazar, “49 grandes no éxitos”, Mitrovich no explica, sería un contrasentido, sino explora la poética posible del autor en un recorrido que sigue los momentos principales de su evolución estética y política, hasta convertirse en el notable artista contremporáneo autor de esa multiexpresiva obra, que pocos reconocen.