Errores y delitos cometidos en el Gobierno generaron caos en el país
Por: Roxana Ortiz A.
La señora Dina Boluarte es la presidenta constitucional del Perú porque el señor Castillo cometió varias infracciones y delitos constitucionales, al haber pretendido disolver el Congreso sin justificación constitucional, como también lo hizo Martín Vizcarra y Alberto Fujimori; según los señaló el experto en Derecho Constitucional, Jorge Cáceres Arce.
“Para cerrar el Congreso requería de una acuerdo del Consejo de Ministros que no lo tuvo; que el Congreso le haya denegados dos veces la Cuestión de Confianza; mientras que fue una infracción el hecho de ordenar a la Policía Nacional de que nadie ingrese al Congreso o en todo caso que desaloje a todos los que estuvieron allí o el ordenar la detención de la Fiscal de la Nación, cuando solo un Juez Supremo lo puede hacer”, explicó.
A ello se suma, dijo, la intención de intervención del Poder Judicial, del Ministerio Público, de la Junta Nacional de Fiscales; generando delitos de sedición, desobediencia, contra el orden público, que están penados por ley.
El vicepresidente de la Asociación Peruana de Derecho Constitucional, indica que Castillo terrones está legal y constitucionalmente detenido, se ha respetado el debido proceso porque ha sido detenido en flagrancia que ha sido el discurso, a pesar que las Fuerzas Armadas y la Policía Nacional no han acatado la disposición dada en el discurso.
Por su parte, la presidenta Dina Boluarte, inició la comisión de errores desde el momento que asumió el cargo y en su discurso señaló que gobernará hasta el 2026, lo que exacerbó los ánimos de la población, porque se trata de una integrante de la misma plancha de Castillo de la cual no se puede desligar. Solo debió decir que se irían todos y convocar a un un proceso eleccionario sin decir fechas.
Igualmente indicó que no ha sabido conformar una plancha presidencial con los personajes que el país en estos momentos necesita, algo como lo que ocurrió con el ex presidente Valentin Paniagua y el ex premier Javier Perez de Cuéllar, y el actual está muy lejos de llegar a ese nivel. Lo mismo señaló del Director General de la Policía Nacional, quien ocupó el cargo en el gobierno de Francisco Sagasti, luego de pasarse por encima de 17 generales y por lo tanto, los policías no le tienen mayor cariño, ni respeto, entre otros funcionarios cuestionados.