Por: José Colque

El obrero Rodrigo Oscanova Vilca fue sentenciado a 30 años de prisión por el delito secuestro agravado en contra de una niña de 2 años en Secocha (Camaná). El hecho ocurrió en junio del 2022 y según la Fiscalía, el denunciado habría planificado el hecho, pero gracias a los pobladores de la zona fue detenido en su momento.

El imputado, natural de Puno, estaba merodeando la zona días antes del ilícito. En ese entonces una menor de 12 años aseguró que el sujeto la seguía e intentó llevársela. Pero aquella tarde del 30 de junio, el varón ingresó a una tienda de abarrotes ubicada frente al grifo Copacabana en Secocha Alta del distrito de Mariano Nicolás Valcárcel y aprovechando que la madre de su víctima salió del local, tomó a la niña que estaba jugando y se la llevó con dirección a un cerro. La menor de 12 años logró visualizar el hecho y alertó a la madre y a los vecinos del sector.

Un grupo de aproximadamente 80 pobladores lo siguieron y lograron el arresto ciudadano cerca de la tranquera denominada “La Miel”. Una vez detenido, fue amarrado a un poste donde lo intentaron quemar, mientras Oscanova excusaba que el rapto de la menor fue por orden de otra persona. No obstante, la Primera Fiscalía Provincial Penal Corporativa de Camaná logró probar en juicio la responsabilidad penal del acusado como autor de este grave delito.