MADELEINE HARTOG BEL: UNA MISS CON HISTORIA
Por: Hélard Fuentes Pastor
Era el año de 1967. Una mujer de belleza singular modelaba en uno de los escenarios más emblemáticos del planeta para ostentar el título de Miss Mundo. Delgada, de cabello negro y ojos marrones, captó la atención del público norteamericano e internacional. Entonces, no hablaba inglés, pero desde Miami Beach Auditorium, prometió hacerlo con una simpatía que conquistó el corazón de millones de ciudadanos. Madeline Hartog Bel Houghton era una mujer paciente, carismática y prudente.
ELLA NACIÓ EN CAMANÁ
El 16 de noviembre de dicho año, ante la expectativa de miles de espectadores que seguían la transmisión de la BBC, admirando la belleza argentina, británica, israelita y guayanés, Madeleine fue coronada como Miss Mundo. Ella no se lo esperaba. Su semblante no solo revelaba emoción, sino humildad. Lentamente, se dirigió al proscenio, algo confundida, recibió la banda, el cetro y la corona. Así se dio uno de los momentos más históricos para nuestro país y región, pues la hermosa Madeleine había nacido en Camaná, provincia de Arequipa.
Se dice que nuestra representante transmitía elegancia y ternura, dos aspectos muy complicados de equilibrar en dichos concursos de belleza; entonces, quienes la habían observado de cerca o la conocía, comentaban que parecía un ángel. Sobria, glamorosa y auténtica.
Joven aún, no solo destacó la belleza peruana vistiendo la tapada limeña, además la introdujo con justicia, sencillez y cultura. Desde aquel año fue motivo de asedio de los periodistas y admiradores, incluso de discusiones entre compatriotas piuranos y arequipeños que peleaban su origen. Por supuesto, la reina del certamen ajena a dichas polémicas continuó sorprendiendo al mundo con su brioso carácter.
El abuelo paterno de Madeleine fue un ingeniero belga, natural de Bruselas, establecido en la ciudad de Lima, que quedó impactado con la belleza de su abuela, María Carmen Granadino, de raíces iquiqueñas. El matrimonio se efectuó el 19 de agosto de 1905, en el templo de la Recoleta de Lima (Partida N° 210). Él, frisaba los 27 y se encontraba radicando en la localidad de Chancay, y ella, 23 años de edad. Ambos vivieron muchos años en la calle Lampa N° 1138 del histórico jirón limeño y en dicho hogar nació Alfredo Enrique, padre de Miss Mundo 1967. Aconteció el 12 de diciembre de 1907, a las 10:00 de la noche (Partida N° 256). Aunque algunos sostienen que era piurano, en realidad nació en Lima y debido a las actividades de Alfredo, el pequeño conoció diferentes lugares del país desenvolviéndose desde su juventud como empresario.
En uno de sus viajes conoció a su esposa, Henriette Germane Bel Houghton, cuya familia se encontraba establecida en Piura. Tanto Fernando Gustavo Bel como Ana María Houghton, echaron raíces en Sullana. Allí nació una tía de Madeleine, Andrea Bel H., el 10 de noviembre de 1922 (Partida N ° 423) y su tío Fernando se casó en 1905. Naturalmente, los Bel Houghton se desenvolvieron entre Piura y Lima, por lo que no es de extrañarnos la coincidencia de Alfredo Enrique con Henriette Bel H.
Aunque no tenemos referencia de su matrimonio, hacia los años 30, estimamos que la pareja ya frecuentaba en Piura, pues tuvieron a su primogénito en 1932, de nombre Alfredo, que la prensa escrita y los biógrafos suelen confundir con el papá, sin embargo, se trata del hermano de Madeleine que fue un aviador militar. Luego, nacieron Betty y Carmen, la primera en Sullana y la segunda probablemente también.
Precisamente, hacia los años 40, Alfredo Enrique se interesó por unos yacimientos de ocres que se encontraban en la provincia de Camaná, efectuando un denunció de 60 pertenencias en 1942 (Boletín de Minas y Petróleo). Un año más tarde, nació su siguiente hija, Ana María, en Camaná. Le siguió Madeleine y, finalmente, Teresina en 1948. A pesar de que las hermanas nacieron en Camaná durante dicha década, su padre desde antes ya visitaba la provincia, no en vano es considerado como el pionero del cine camanejo.
Todo marchaba bien. Madeleine Antonia había nacido un año bastante significativo para Alfredo Enrique, un 12 de junio de 1947, siendo bautizada al día siguiente en la antigua iglesia San Miguel, teniendo como padrinos a Andrés Granadino y Madeleine P. de Granadino, que fueron representados por los abuelos Alfredo H. y Carmen G. (Partida N° 138).
Hemos dicho que fue un año significativo porque el padre de la modelo, se encontraba como alcalde de la provincia, sin embargo, el contexto político de crisis que se vivía en el gobierno de Bustamante y Rivero, ocasionó que el empresario tenga que retirarse del cargo, un 8 de diciembre. Alfredo Enrique se mantuvo en la provincia varios meses, por lo que Madeleine pasó su primera infancia en Camaná. Luego, la familia se trasladó a Lima, creemos que sucedió de esa manera y no directamente a Piura, porque el 9 de octubre de 1953, nació la última hija de su matrimonio con Henriette, Susana María Antonia, en cuya partida N° 3850, la mamá aparece como piurana.
La familia debió mudar su destino nuevamente a Piura, donde pasó la niñez y adolescencia de Madeleine, quien incluso se menciona que vivía en la urbanización Clarke y trabajaba en Automotores San Jorge, ubicado entre la avenida Sánchez Cerro y la calle Arequipa.
Luego del Miss Mundo, a su retorno, realizó una gira por diferentes lugares del país. Volvió a su tierra natal, siendo acogida por una multitud que aplaudió su recorrido en un carro decorado. Desde entonces, Madeleine ocupó la portada de muchas revistas y diarios. Se inventaron varias noticias sensacionalistas en torno a su figura. ¿Qué no se dijo? Pues como todo personaje que se incorpora a las páginas sociales de los medios de prensa, la reina de belleza despertó numerosos rumores, hasta su matrimonio el 19 de junio de 1976 con el norteamericano que curiosamente conoció en Lima, Harold Arthur Davis. Por eso, dicha unión se llevó a cabo en la parroquia Nuestra Señora del Consuelo (Monterrico) en Santiago de Surco.