Por: Juan Palo

Solo en una liga mediocre podría presentarse walkover, suspensión y reprogramación de partidos, hechos que conllevarán en el futuro a ser calificado como un campeonato pésimo en organización, se suma el pobrísimo nivel futbolístico.

Sin duda, podríamos estar viviendo en la mayor debacle de la historia del fútbol, que no solo afectará al torneo local, mal llamado Liga 1, también perjudicaría en las copas Sudamericanas y Libertadores, principalmente en las próximas eliminatorias sudamericanas para el Mundial, de México, Estados Unidos y Canadá 2026.

Lamentablemente, los “dueños y amos” del balompié nacional, que es la Federación Peruana de Fútbol (FPF), está en líos con seis clubes por los derechos de trasmisión por televisión, y la FPF como organizadores de la Liga 1, al parecer, habrían tomado una represalia, porque están reprogramando y suspendiendo encuentros, coincidentemente con las instituciones que tienen diferencias. Esas acciones, las comentó el periodista deportivo, Erick Osores, “quien no está con Lozano, le darán con látigo”.

Lo más conveniente es sentarse en una mesa y sostener reuniones para llegar a acuerdo, y si ambos tienen que ceder lo tendrán que hacer para sacar a nuestro fútbol de “cuidados intensivos”.