Por: Edgard Norberto “Beto” Lajo Paredes

El 07 de mayo de 2024 (falta 1 año), se cumplirá el Centenario de la Alianza Popular Revolucionaria Americana (APRA), acto fundacional realizado en la Universidad Nacional Autónoma de México, en 1924, cuando Víctor Raúl Haya de la Torre, entregó, a la Federación de Estudiantes Mexicanos, la Bandera de Indoamérica (color rojo, mapa de América Latina, en círculo dorado), bandera de la independencia ideológica del pueblo, precisamente, a los 100 años de la independencia política de las clases criollas de la América morena.

En el Bicentenario de nuestra emancipación continental, verificamos el triunfo universal de la doctrina aprista, frente al marxismo leninismo stalinismo y maoísmo; evidenciados en: las rectificaciones de la Socialdemocracia; irrupción del Eurocomunismo; cambio de timón de la China comunista; surgimiento de los Tigres del Asia; caída del Muro de Berlín y eclosión de la Perestroika rusa.

También, en: la revolución científica y tecnológica; avance de la democracia funcional; instalación de la interdependencia mundial, no meramente globalización; y, el equilibrio de los componentes del Estado del siglo XXI: sector público, sector privado y sociedad civil. Yendo, irremediablemente, sin prejuicios absurdos, ni ideologismos desfasados, tampoco, apoliticismo egoísta. Hacia un mundo de convivencia, coalición y concertación de clases, culturas, etnias, generaciones y géneros. Desechando la suicida “lucha de clases”.

Las tesis hayistas triunfantes, son: Antimperialismo constructivo moderno; Integracionismo científico; Crear riqueza para el que no la tiene; Interamericanismo democrático sin imperio; Internacionalismo solidario; Frente único de trabajadores manuales e intelectuales; la lucha por el desarrollo es una lucha de pueblos, no de clases; Ambivalencia del imperialismo; Ningún país subdesarrollado podrá salir de su retraso sin la ayuda económica y tecnológica de los países desarrollados; Realidad de necesidades recíprocas entre las economías avanzadas, economías emergentes y economías en desarrollo; Democracia de pan con libertad y justicia social; Negación dialéctica y superación relativista del marxismo; Aceptar los portentos de la revolución científica, tecnológica e información y comunicación; Admitir que la violencia es la sepulturera de la historia, ya no la partera de la misma; y Multipolaridad democrática y cooperativa.

Haya, saludando las trascendentales rectificaciones del Socialismo europeo, iniciadas por el Partido Social Demócrata Alemán, en su histórico Congreso Extraordinario de Bad Godesberg, del 13, 14 y 15 de noviembre de 1959, escribió: “Los Nuevos Partidos del Pueblo en Europa. De un partido de la clase obrera, el Partido Social-Demócrata alemán ha pasado a ser un Partido del Pueblo dice, clara e inequívocamente el nuevo programa fundamental del más antiguo, ortodoxo y disciplinado movimiento socialista de Europa. Con él, los demás partidos que forman la II Internacional han tomado el mismo camino: Dejar de ser fuerzas partidarias ‘de una sola clase’ para devenir organizaciones de ‘frente único de clases’, en las cuales se suman los trabajadores manuales e intelectuales, y lo que antes se llamaba las pequeñas burguesías”. (Obras Completas de Víctor Raúl Haya de la Torre, Segunda Edición 1984, t. 7, p. 275).

Respecto al Eurocomunismo, otra negación del marxismo, leemos: “Hay que reconocer, en cambio, que el enfoque que se hace a continuación del problema del Estado entraña una diferenciación con las tesis de Lenin en 1917 y 1918, aplicables a Rusia y teóricamente al resto del mundo en aquella época; inaplicables hoy, por rebasadas, en los países capitalistas desarrollados de Europa occidental”, añade “Y lo que las ha hecho inaplicables es el cambio de las estructuras económicas y la ampliación objetiva de las fuerzas sociales progresistas, el desarrollo de las fuerzas productivas -entre ellas la energía nuclear-, los avances del socialismo y la descolonización, la derrota del fascismo en la segunda guerra mundial” (Eurocomunismo y Estado de Santiago Carrillo, Editorial Crítica, Grupo Editorial Grijalbo, Barcelona 1977, p. 12). Eurocomunistas y socialdemócratas, se alejan de Marx y se acercan a Haya de la Torre.

En la Plataforma del Comité Central del Partido Comunista de la Unión Soviética de febrero de 1990 titulado “Hacia un Socialismo Democrático y Humanitario”, plantean “Hacia una amplia democracia socialista y el autogobierno del pueblo”, dice: “El Partido parte, en su política, del reconocimiento de la voluntad soberana del pueblo como la única fuente del poder. El Estado de derecho de todo el pueblo excluye la dictadura de cualquier clase”. (Revista Panorama Internacional, Suplemento Teórico N° 3/90, p. 14). Esta es, la reforma ideológica más impactante del otrora comunismo ruso, suprimir “la dictadura del proletariado” y adoptar la democracia plural. Viva Víctor Raúl Haya de la Torre y su Aprismo vigente.