El juez Raúl Justiniano, del Octavo Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional, rechazó dictar prisión preventiva contra Lilia Paredes, la esposa del expresidente Pedro Castillo asilada en México desde diciembre pasado. Lo mismo ocurrió en el caso de sus hermanos Walter y David Paredes.

La fiscalía había solicitado esta medida contra ellos tres, investigados por el caso de la presunta red criminal instalada en el Ministerio de Vivienda durante el gobierno de Pedro Castillo (Caso Anguía). En concreto, se pidió que se varíe la comparecencia simple (sin restricciones) que venían cumpliendo desde agosto del año pasado por una prisión preventiva.

Al momento de resolver el pedido, el magistrado recordó que uno de los requisitos para varia la comparecencia simple por una prisión preventiva es que hayan evidencia (elementos de convicción) nueva. Así, al analizar la evidencia presentada por la fiscalía, advirtió que toda esta databa de mediados del año pasado, cuando se formalizó investigación contra ellos solo bajo comparecencia simple.

En consecuencia, el juez consideró que no se cumplía ese requisito para la variación por prisión preventiva para los tres investigados. Adicionalmente, sostuvo que no se debía considerar el asilo político otorgado por México a Lilia Paredes como peligro de que se afecte la investigación en su contra. Por todo ello, declaró infundada la solicitud de la fiscalía.

Durante la audiencia del 25 de mayo, el fiscal Jorge García Juárez estimó que Paredes Navarro podría recibir una condena de 8 años de prisión por el presunto delito de organización criminal y reiteró que la ex primera dama sería coordinadora de una presunta red criminal, que tuvo como cabecilla, al entonces mandatario Pedro Castillo.