Por: Germán Yuca CH.

Duberlí Rodríguez, quien el pasado diciembre asumió la defensa legal del extitular del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, considera que mientras no se declare judicialmente la culpabilidad ni Castillo ni Torres deberían estar presos

Durante su visita a la región Arequipa, el expresidente del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez Tineo, aseguró que la prisión preventiva dictada para Pedro Castillo y su defendido Aníbal Torres es innecesaria. Según el abogado, pese a haber efectuado un golpe de Estado, no es posible acusar al exmandatario de rebelión porque dicha acción nunca llegó a consumarse; razón por la que asegura “no hay acción punible”.

“Cuando se va a cometer un delito se pasa por el “Iter criminis” o el camino del crimen. Primero inicia cuando se te ocurre matar o robar, la ideación; le sigue la búsqueda de las herramientas para cometer el delito, los actos preparatorios; la fase final es cuando consumas el delito y cometes lo que previamente habías planeado. Los dos primeros actos: la ideación y la preparación no son punibles. Solo es punible cuando el delito se consuma o se interrumpe y queda como tentativa”, declaró Rodríguez Tineo.

El abogado, quien el pasado diciembre asumió la defensa legal del extitular del Consejo de Ministros, Aníbal Torres, considera que mientras no se declare judicialmente la culpabilidad ni Castillo ni Torres deberían estar presos. Para ello, apeló al recurso denominado “tentativa inidónea”, asegurando que los involucrados eran incapaces de consumar de lo que se les acusa en cualquier circunstancia posible.

Rodríguez Tineo aduce que por más que hayan tenido la intención de revelarse no tenían apoyo de ninguna autoridad ni de la Policía. Por lo que hubiera resultado imposible cometer los delitos de los que se les acusa. “Pedro Castillo y Aníbal Torres de momento son solo sospechosos de rebelión y deberían afrontar su proceso en libertad, en comparecencia (restringida). Excepcionalmente un acusado puede ir preso en etapa de investigación, pero eso solo cuando se trata de organizaciones criminales, crimen organizado, etc”.

Ante la crisis generalizada de corrupción que atravesamos como país e incluso región, el exfuncionario detalló que existen dos maneras de luchar contra la corrupción. Una mediante procesos punitivos que terminan en encarcelamiento y otra mediante un proceso formativo iniciado desde la educación, pues según afirmó “la corrupción nace del ejemplo que se recibe de los padres, la escuela y la universidad. Por lo que se debería actuar de manera preventiva. Quien se cría honrado bien difícil que se vuelva corrupto”, finalizó.