Por: Germán Yuca Ch.

Según los avances preliminares de la comisión designada para fiscalizar los 4 nosocomios, los vacíos en las contrataciones, los expedientes técnicos mal elaborados y la ausencia de penalidades hacia los consorcios contratistas ocasionan que la culminación de las obras no sea una realidad a corto plazo.

CONSTRUCCIÓN DEL HOSPITAL DE CAMANÁ SERÁ EL 2025

La ejecución de las obras en los hospitales de Chala (Caravelí), Cotahuasi (La Unión) y Maritza Campos de Cerro Colorado culminará, en el mejor de los casos, a finales del 2024. Asimismo, el caso del hospital de Camaná es aún más grave y se estima su culminación recién en el 2025. Acorde a los avances preliminares obtenidos por la comisión designada por el Consejo Regional de Arequipa (CRA) para fiscalizar los 4 hospitales iniciados durante las gestiones del exgobernador Elmer Cáceres Llica y la exgobernadora Yamila Osorio.

En una reunión multisectorial, representantes de la Gerencia de Salud (Geresa), la Gerencia de Infraestructura y la Gerencia de Supervisión y Liquidación de Proyectos expusieron un informe situacional acorde a temas de su competencia en la construcción de los hospitales de Chala, Cotahuasi, Camaná y el Maritza Campos. Tras analizar las exposiciones, la consejera Norma Ortega, encargada de la comisión fiscalizadora del CRA, realizó un balance de los resultados.

Primero, advirtió sobre un posible sobredimensionamiento de la población del hospital de Cotahuasi; es decir, el Consorcio Salud Cotahuasi proyectó la obra para más población de la realmente existente en la zona (cerca de 3 mil habitantes). El efectuar la obra para una población mayor a la real generó un gasto innecesario para el gobierno regional y, además, ralentizó los progresos en la obra.

Por si fuera poco, en Cotahuasi (86.35% de avance físico) y Chala (88% de avance físico) las constructoras no previeron la instalación de servicios básicos, de modo que las obras iniciaron sin garantizar primero la obtención de agua o luz. En consecuencia, el hospital de Chala no tiene asegurado el acceso al servicio de agua potable, por lo que funcionaría con agua de cisternas. Asimismo, debido a su ubicación el nosocomio de Cotahuasi no tiene capacidad eléctrica suficiente para asegurar el funcionamiento de los equipos médicos del hospital.

El caso más grave es el del hospital Maritza Campos (58% de avance físico), pues el contrato no se puede disolver dado que la empresa contratista Consorcio Hospitalario Sur interpuso una medida cautelar que supuso la pérdida del control de la obra. Solo la intervención de la Procuraduría Regional de Arequipa podrá determinar la fecha de culminación de la obra.

Caso similar ocurrió en el hospital de Camaná. El pasado 6 de junio se cumplió el plazo de 210 días designado por el gobierno regional para la entrega de la obra; sin embargo, en ese periodo la contratista realizó apenas el 1.3% de progreso. Por lo que el hospital de Camaná tiene un progreso de apenas el 68% de avance total desde que se reinició su ejecución el 9 de noviembre del 2022.

“Se temía que ocurra lo mismo que en Maritza Campos, pero llegamos a tiempo y mantuvimos reuniones con la contratista y manifestamos nuestra preocupación por la situación”, declaró la consejera por Camaná, Norma Ortega, quien preside además la comisión investigadora.

Respecto a las adendas en el contrato, Chala tuvo 17 ampliaciones en el plazo inicial de entrega y 3 adicionales económicos; Camaná 10 ampliaciones y 8 adicionales económicos; Maritza Campos 35 ampliaciones y 15 adicionales económicos y Cotahuasi 11 ampliaciones en el plazo de entrega.

¿QUIÉN ES RESPONSABLE DE LOS RETRASOS?

Para la consejera los retrasos en la entrega de los hospitales se deben a vacíos técnicos contractuales dejados por las pasadas gestiones del gobierno regional; fueron “muy favorecedores” con las empresas contratistas. Generalmente un contrato entre un consorcio con un gobierno regional tiene 20 penalidades, pero el contrato de los hospitales tiene apenas 5.

“Debido al vacío de los contratos, las empresas contratistas estaban en una posición desigual con el gobierno regional y no se les podía presionar para culminar las obras”, declaró la consejera Ortega.

 Asimismo, algunos de los consorcios encargados de los hospitales están compuestos por las mismas empresas. La empresa ASIGNIA Infraestructura está involucrada en la construcción de los hospitales de Chala, Cotahuasi y Maritza Campos. Asimismo, las empresas Neptuno Contratistas Generales y Dextre+Marimoto Arquitectos se encargan (junto a ASIGNIA Infraestructura) del hospital de Chala y el de Cotahuasi. Mientras que Eralma (junto a otras 4) está a cargo de la construcción del hospital de Camaná y el Maritza Campos.

“¿Por qué sí se acabaron los hospitales de Cocachacra y Alto Inclán? Porque son otras empresas; en cambio, en los consorcios encargados de los hospitales de Camaná, Cotahuasi, Chala y Maritza Campos están las mismas empresas”, refirió Ortega.

Si la comisión investigadora del Consejo Regional de Arequipa efectúa con éxito su labor se conseguirá la culminación de estos centros de Salud en fechas cercanas a las proyecciones establecidas; sin embargo, hay muchos temas pendientes que el gobierno regional deberá solucionar para que los consorcios involucrados puedan finalmente culminar la construcción de los hospitales.

«Es un tema de varios años atrás. Es una pena la situación. Porque nos afecta directamente, porque como Geresa tampoco podemos mejorar más los establecimientos. En el caso de Camaná, por ejemplo, no se puede hacer más mejoramientos porque es una estructura completamente obsoleta”, declaró el Gerente regional de Salud, Walther Oporto.