IGP intensifican monitoreo en volcanes de Arequipa y Ayacucho
Realizan mantenimiento de estaciones de monitoreo instaladas en los macizos.
Entre los meses de septiembre y octubre, profesionales en electrónica e informática del Instituto Geofísico del Perú (IGP) visitaron los volcanes Sabancaya y Coropuna en Arequipa, así como Cerro Auquihuato y Sara Sara en Ayacucho, para realizar el mantenimiento de las estaciones de monitoreo instaladas en estos macizos que son parte de la Red Geofísica Nacional de Volcanes.
Durante alrededor de dos semanas, los especialistas ascendieron a puntos de difícil acceso ubicados, incluso, por encima de los 5000 m s. n. m., donde el IGP, por encargo del Estado peruano, ha implementado estaciones que albergan sensores sísmicos, receptores GPS, sensores de monitoreo de gases volcánicos y videocámaras científicas que recogen datos en tiempo real de cada volcán.
Como parte de los trabajos, se realizó la revisión de las líneas de transmisión para el envío de datos desde los volcanes hasta las instalaciones del IGP en Arequipa, en donde opera el Centro Vulcanológico Nacional (CENVUL). Igualmente, se llevó a cabo el mantenimiento del sistema de energía de cada estación. Es preciso mencionar que todas las estaciones del IGP utilizan energía limpia para su funcionamiento.
El IGP realiza estos trabajos de mantenimiento tres veces al año de manera programada, lo que garantiza al Ministerio del Ambiente (MINAM), a través del IGP, emitir de manera oportuna reportes, boletines e informes sobre la evolución del comportamiento dinámico de cada volcán.
“La Red Geofísica Nacional de Volcanes abarca 4 regiones del sur peruano. En su sector norte, el volcán con mayor cantidad de instrumentos es el Sabancaya en Arequipa, en erupción desde 2016. Gracias a que la red opera en tiempo real, podemos detectar variaciones que ocurren en cuestión de horas o días e informar inmediatamente a las instituciones del Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres, gobiernos locales y regionales”
explica Hernando Tavera, presidente ejecutivo del IGP.
De esta forma, el IGP continúa contribuyendo, mediante productos e información científica, a garantizar la seguridad de casi 2 millones de personas que habitan próximas a volcanes activos en el Perú, lo que refleja una vez más su compromiso de hacer “ciencia para protegernos, ciencia para avanzar”.