Definitivamente, en todo el 2023 la situación económica del Perú no ha sido buena y mucho menos para el 28% de peruanos que, según el BCR, llegan al 31 de diciembre más pobres que antes.

El Banco Central de Reserva del Perú (BCR) dio cuenta que el 2023 terminará con un PBI del 0.5% y precisó que el número de pobres habrá llegado, al 31 de diciembre, al 28 por ciento de peruanos que tienen familia. En buen romance, Julio Velarde, presidente del BCR, le dijo a la prensa peruana que el 2023 ha sido un mal año para su economía y la de todos los ciudadanos.

En los primeros meses del año nuestra economía se resintió por la violencia en las calles sobre todo en enero, febrero y marzo cuando hubo excesos en las protestas y también 60 muertes o más que no han sido ni esclarecidas en cuanto a sus autores inmediatos ni referidas a los causantes de las mismas.

Esa violencia que causó muertos y heridos está ahora en proceso de investigación fiscal y todo indica, a razón de lo expuesto por la exfiscal suprema Patricia Benavides, que la responsabilidad estuvo entre la presidente de la República, Dina Boluarte y el titular de la presidencia del Consejo de Ministros, Alberto Otárola. Nada está dicho aún en documentos y todo aparece como conjeturas y cuentas por saldar.

Lo evidente es que los intentos del Ministerio de Economía y del gobierno entero por modificar el seguimiento de una política, que empezó con Pedro Castillo, no ha cambiado en lo sustancial con Dina Boluarte, sino se ha mantenido y agravado con fenómenos naturales que, como El Niño, podrían tener también efectos negativos a finales del mes y en los primeros tiempos del 2024.