El proyecto de ley propone que se incluya en la Ley de Aeronáutica Civil que las empresas públicas o privadas otorguen este beneficio a todos los ciudadanos que acrediten alguna discapacidad en el Conadis.

La congresista Hilda Portero (Acción Popular) presentó un proyecto de ley que propone que las personas con alguna discapacidad tengan un descuento de 50 % en la compra de pasajes aéreos, tanto en vuelos nacionales o internacionales.

Dicha iniciativa legislativa fue presentada el último jueves y, al día siguiente, fue remitida a las comisiones parlamentarias de Economía y la de Transportes para su debate. 

El proyecto de ley tiene por finalidad «permitir que toda persona con discapacidad, acreditada por el Concejo Nacional para la Integración de la Persona con Discapacidad (CONADIS), tenga el derecho a acceder al beneficio de descuento del cincuenta por ciento (50 %) en pasajes aéreos de empresas de transporte público o privado para vuelos nacionales o internacionales».

En ese sentido, indica que se incorpore el inciso 84.3 en el artículo 84 de la Ley N° 27261 o Ley de Aeronáutica Civil en lo que se refiere a las tarifas y fletes del servicio de transporte aéreo.

«Las personas con discapacidad tiene el derecho a recibir el beneficio al descuento del cincuenta por ciento (50%) en pasajes aéreos de empresas de transporte público o privado de vuelos nacionales o internacionales. En caso que deba viajar con acompañante, se debe garantizar la extensión del beneficio«, señala la propuesta.

En sus fundamentos, indica que «el pasajero con discapacidad debe tener a su disposición los derechos que dispone cualquier pasajero, desde que realiza la reserva con la compañía aérea hasta que llega a su destino».

«Es preciso extremar el cumplimiento de las obligaciones por parte de todos los agentes que intervienen en el transporte aéreo para proporcionar al pasajero discapacitado seguridad y satisfacción «, señala.

«El acceso a los servicios elementales se les hace complicados justamente por el hecho de movilizarse que requiere de un mayor esfuerzo para las personas con discapacidad, más aún si los mismos se movilizan con silla de rueda, pues por un lado está la indiferencia de los transportistas, y por otro lado es el costo que deben afrontar justamente por acceder a su derecho la transito», puntualiza.