Ayer entrenó con sus compañeros en la Vallejo.

Paolo Guerrero dejó los aviones y pisó cancha. Ayer cumplió su primera jornada de entrenamientos con el equipo de la Universidad César Vallejo. Decenas de hinchas estuvieron en el lugar, pero no pudieron lograr el objetivo de estrechar la mano del jugador, tomarse una foto o tener un autógrafo en una camiseta.

La presentación oficial del delantero peruano se realizará el próximo martes 27. La expectativa de la afición nacional está en saber cuándo será el debut vistiendo la camiseta anaranjada. El próximo compromiso de Vallejo es en casa ante Cusco FC, por la quinta fecha, y en la sexta visitarán a Sport Boys en el Callao.

Todo dependerá de sus condiciones físicas para poder estar en los compromisos oficiales. Además, deberá tener el sí por parte del entrenador Roberto Mosquera, quien días atrás estaba resignado a no ver en su oncena al destacado futbolista.

La llegada de Guerrero al Grupo Aéreo Número 8 de Trujillo generó gran expectativa de los hinchas que no solo siguen al club Vallejo, sino también al Carlos Mannucci e inclusive Alianza Lima. Nadie pudo tener cercanía con él porque se retiró por una puerta posterior del terminal. Sin embargo, en la ruta a su nueva casa, detuvo su vehículo para fotografiarse con unos niños que estaban por las calles y lo reconocieron en la caravana. Se bajó del auto y posó.

Tras llegar a un acuerdo con el presidente Richard Acuña, jugará por un año en el conjunto norteño aunque hay una cláusula de su contrato que dice que si recibe propuestas del exterior podría darle preferencia y dejar la institución. Su presencia en el torneo local servirá para el incremento de venta de entradas, souvenirs, contratos publicitarios y otros beneficios.