Boticario, la historia de una arraigada tradición familiar
Por: Rocío Velazco C.
La fascinante historia de Destilería Boticario Dry Gin nace con Buenaventura Rendón, quien en 1890, llega a Acoy, un pequeño pueblo del Valle de Majes en la provincia de Castilla. El producto principal era el aguardiente de caña o cañazo elaborado de la caña de azúcar.
Boticario, es una bebida que en poco tiempo ha logrado posicionarse en el mercado local, regional, nacional e incluso ya logró premios internacionales en Europa y Estados Unidos, tiene como punto de partida toda una vasta tradición e historia familiar que le ha permitido marcar la diferencia. La bodega matriz se encuentra en Acoy, a tres horas de Arequipa y sus anfitriones son la pareja conformada por María del Carmen Rendón Rendón y Fernando Jalsovec Oviedo. Quienes tienen la oportunidad de visitarla pueden observar plantaciones de caña de azúcar, el trapiche, alambiques, tinajas, falcas, fermentadores y la asombrosa cordialidad de sus propietarios.
En 1954, doña Hermelinda Rendón, casada con Víctor Estremadoyro, heredó la destilería de su padre: Buenaventura Rendón, continuando así con la producción de cañazo y en menor escala elaboraban vino y pisco.
María del Carmen Rendón, única hija de doña Hermelinda, recibe el legado en 1996 y cuenta con el dedicado y tenaz apoyo de su esposo Fernando Jalsovec Oviedo, ambos se hacen cargo de la destilería y así logran que perdure la tradición familiar.
Diego Jalsovec Rendón, hijo de Fernando y María del Carmen, desde muy niño estuvo acostumbrado y familiarizado con el quehacer de la destilería y siempre estuvo interesado por el proceso de fabricación del cañazo, pero por sus estudios de ingeniería no tenía tiempo. Sin embargo, en el 2017 inicia pruebas de fabricación de pisco, ron y gin, teniendo como materia prima el jugo de caña (guarapo).
Además, probó con distintos productos como ron y anisado, hasta que se llegó al gin, y en marzo del 2019, se lanza oficialmente al mercado el primer producto: Boticario Dry Gin.
María del Carmen, madre de Diego, refiere que el nombre Boticario, es en honor a Víctor Estremadoyro, que era boticario de oficio, tenía la única botica en Aplao, capital de la provincia de Castilla.
“Recordemos que antiguamente el boticario del pueblo era la persona que realizaba mezclas de distintas hierbas e insumos para curar los malestares y males de las personas, antes que funcionaran las farmacias, como las conocemos hoy, la gente de los pueblos acudían al boticario en busca de recetas caseras”, agregó.
Diego, nieto del boticario de Aplao, logró en el 2019, la mezcla final y más exitosa, luego de cuatro generaciones. Tiene tres presentaciones el Tradicional, Frutos Rojos y Blueberry.
El secreto de la familia Jalsovec Rendón, es trabajo con dedicación y esmero, por años cuidan de las plantaciones de caña de azúcar para luego cultivarla, llevarla al trapiche, envasar en tinajas de 1200 a 1500 litros el jugo o guarapo para su fermentación durante 3 a 5 días y finalmente destilarlo.