Por: Carlos Meneses

Ahora sí, nadie puede detener Majes II.

El Ejecutivo, cumpliendo compromiso con Arequipa, remitió al gobierno regional los alcances de un acuerdo que permitirá hacer realidad, con recursos económicos del gobierno central, la segunda etapa de la irrigación Majes. Ahora la gran decisión depende de los consejeros regionales y con ello la oportunidad de habilitar 38 mil hectáreas nuevas para la agricultura, las centrales hidroeléctricas de Lluta y Lluclla y la creación de más de 100 mil puestos de trabajo directos o indirectos.

Después de la anunciada decisión de un entendimiento entre Perú y Canadá, la realización de Majes significa que la democracia peruana podrá aportar dentro de los próximos años cerca de 150 mil hectáreas de cultivo en el centro y el sur del país.

Nada se puede oponer a que se hagan realidad los 2 proyectos y que tengamos que lamentar más años de espera. Majes está detenido hace más de media docena de años, en los que se ha hecho nada para la segunda etapa y ha persistido el descuido y abandono con Majes I, que alcanzó a entregar la administración de Velasco Alvarado.

Esta también será la hora de la unidad, ningún arequipeño puede poner trabas a que Majes II se haga realidad. Ya no hay justificación alguna para dejar pasar el tiempo en discusiones que no conduzcan al final feliz que se espera. El Gobierno Regional de Arequipa tiene un reto por delante y es favorecer el que se logre el objetivo que la región espera.

Tienen que terminar diferencias, que resultan pequeñas, en relación a lo grande que significa realizar Majes. Comprendemos que hay problemas que se heredan y que se deben resolver invocando comprensión. El destino está marcado y solo se necesitará voluntad para alcanzarlo.