UCAYALI

Desde pequeña, Yossi Quijano Armas, ahora de 17 años, y perteneciente al programa Juntos, tenía claro que quería estudiar enfermería. La vocación por atender y cuidar a las personas la heredó desde muy pequeña, cuando acompañaba a su abuela a atender a las parturientas de la comunidad nativa de Kakataibo de Puerto Azul, ubicada en las riberas del río Aguaytía, en la provincia de Padre Abad, región Ucayali.

La familia de Yossi es usuaria del citado programa social desde el 2017. Para ella este hecho fue un punto de quiebre, pues no solo recibían los abonos que su mamá usaba para comprarles útiles a ella y a sus otras tres hermanas, sino que, además, aprendió de los gestores locales la importancia de los estudios para lograr un cambio en la vida de su familia.

“Con el apoyo que recibimos del programa Juntos mi mamá nos compraba nuestros cuadernos, los lapiceros y los útiles para todas mis hermanas. Era una gran ayuda para nosotras”, comenta.

Desde la primaria se caracterizó por ser una alumna talentosa, aplicada y responsable en todos sus cursos, logrando culminar la secundaria en el primer puesto del colegio de su natal Kakataibo de Puerto Azul.

“Cuando estaba en el último año de secundaria, el gestor local del programa Juntos visitó el colegio y nos explicó sobre las posibilidades de estudiar una carrera universitaria o técnica con todos los gastos cubiertos por el Estado, a través del programa Beca 18 del Pronabec”, recuerda.

Fue así que Yossi decidió postular a una vacante en la convocatoria 2023 de Beca 18. Con el sueño de convertirse en profesional, luego de terminar el colegio viajó a la localidad de Aguaytía para prepararse y postular a la carrera de Enfermería Técnica en el Instituto de Educación Superior Público Padre Abad.

Su esfuerzo y perseverancia dieron frutos, Yossi ingresó en los primeros lugares. Pero el sueño aún estaba a la mitad, pues había ingresado, pero necesitaba la beca, dado que su familia no podía solventar sus estudios.

Luego de presentar sus documentos en el Pronabec y dar el examen de selección, regresó a su comunidad a esperar con ansias los resultados. “Cuando estaba en mi casa, junto a mi mamá, escuchamos el comunicado en el alto parlante de la comunidad. Anunciaban a los ganadores y pude escuchar mi nombre. Fue una alegría inmensa, saltamos y lloramos juntos”, cuenta emociona.

Con este logro, Yossi se convertirá en la primera profesional de su familia y un ejemplo para sus hermanas Marlith (15), Verónica (11) y Ana (5), que ya piensan seguirle los pasos. Su madre, Katty Armas Chávez, no solo se siente orgullosa, sino también, confiada en que su hija, ha dado el primer paso para cambiar la vida de toda su familia.