Giovani Salas, subgerente de Gestión Ambiental de la Municipalidad Provincial de Arequipa (MPA) mencionó que se redujo en un 30% la contaminación ambiental producida por las pollerías en la provincia de Arequipa. Según explicó esto se debe a que varios de estos establecimientos ya no están funcionando y a que los tradicionales hornos a carbón han sido cambiados por unos eléctricos.

En este año solo 50 pollerías prestan atención al público cuando en años anteriores se contaban más de 100 locales en este giro.

“Se ha podido reducir por lo menos un 30%, dado que no hay muchos establecimientos comerciales y, además, ahora usan un mejor sistema para la preparación de los pollo a la brasa”, mencionó.

La fiscalización que se realiza es a las emisiones de humo de los hornos, ya que existen diferentes tipos: a base de carbón, de leña y eléctricos.